Comienza la acogida de temporeros en Logroño con una afluencia incierta

La vendimia en el campo, como cada año, empieza a notarse en la ciudad. Logroño, como todos los septiembres, comienza a registrar un continuo y constante 'goteo' de temporeros, que a buen seguro irá en aumento pese a que la campaña de recogida de la uva va con retraso, y ello ha llevado a la Mesa contra la Pobreza a activar el dispositivo especial de acogida (atención).

Así, y aunque la vendimia no esté ni mucho menos generalizada y aún no haya llegado a la capital de La Rioja, el polideportivo Titín III abrirá este jueves sus puertas, con capacidad para 150 personas, con la incógnita de la afluencia de migrantes en una campaña que se prevé, como todas al respecto, incierta. Una apertura, que también como siempre, será por un mes.

Y todo ello mientras ya se ven movimientos entre estaciones, con cuadrillas asentadas desde esta misma semana en los alrededores de la antigua terminal de autobuses. De hecho, y ante lo imprevisible del comportamiento del dispositivo, el mismo se mantendrá «en máximos -como otros años-, con todos los recursos de los que se disponen en un intento de optimizarlos».

Así lo ha explicado la concejala de Servicios Sociales, Patricia Sáinz, quien junto a la directora general de Servicios Sociales del Gobierno de La Rioja, Marta Gómez, han visitado el citado polideportivo (un servicio de carácter subsidiario de las Administraciones local y regional para atender las necesidades básicas de todas las personas que acuden a trabajar a la vendimia y que requieren estos servicios, pese a que sigue siendo competencia del empleador facilitar/financiar el alojamiento/manutención).

«El Ayuntamiento ofrece, por razones humanitarias, la atención y servicios adecuados a las personas que vienen a la ciudad para buscar trabajo en la campaña de la vendimia. Por ello, trabajamos para ofrecer un servicio digno formado por comida caliente y un servicio de duchas, entre otras muchas cosas, gracias a Logroño Deporte y a la concejalía de Servicios Sociales», ha recordado.

El dispositivo habilitado en el polideportivo municipal Titín III (frontón), situado en la calle Serradero (en Pradoviejo), ofrece un total de 150 camas, servicios de higiene personal, duchas, consigna, manutención (desayuno, cena y almuerzo) y recarga de móvil, así como servicio de acogida todos los días, desde las 18.30 hasta las a las 07.00 horas.

En el caso de que se cubrieran todas las plazas, las personas que requieran este servicio serán derivadas al Centro Municipal de Acogida o a las dependencias del proyecto 'Alasca' (no en vano, el primero es el que ha acogido a los más madrugadores estas semanas previas).

«Este año vamos a procurarles, además, acceso gratuito a wifi para facilitar la comunicación con sus familias y la posibilidad de que puedan conocer las ofertas de trabajo», ha añadido Sáinz, destacando la principal novedad.

En el dispositivo trabaja de lunes a domingo el personal de la empresa que gestiona el servicio, personal del Ayuntamiento y voluntarios de Cruz Roja para cubrir adecuadamente todo el horario de apertura y llevar a cabo la limpieza diaria de las instalaciones de alojamiento, duchas, comedor y oficinas de atención social, además de la desinfección diaria de los colchones utilizados y la reposición de las sábanas desechables, así como la atención del servicio de lavandería.

El mismo, una vez más, es fruto de un convenio de colaboración entre el Gobierno de La Rioja y el Ayuntamiento de Logroño que establece que la titularidad del programa corresponde al Ayuntamiento de Logroño, mientras que la Consejería de Salud colabora aportando 105.000 euros para el desarrollo del mismo.

Tal operativo se estableció en la reunión de la Mesa contra la Pobreza celebrada el pasado 6 de septiembre en la que participaron también los representantes de Cruz Roja, Cáritas, Cocina Económica, Banco de Alimentos, Universidad de La Rioja, así como los portavoces de los distintos grupos municipales del Consistorio.

En dicho encuentro, se realizó un diagnóstico de la situación actual en la que se encuentra la ciudad y se recogieron los datos de la experiencia de años anteriores para detectar posibles incidencias, con el objetivo de prestar los mejores servicios de acogida, de alojamiento, manutención y atención social a las personas temporeras sin recursos que acudan a Logroño en busca de empleo para la recogida de la uva, con la supervisión y control de la unidad de Servicios Sociales del Ayuntamiento.

Nadie se atreve a pronosticar qué se puede esperar este año después de que el pasado se pasase de las 454 personas atendidas en 2022 a 812. Un incremento que no pasó desapercibido y que vino a romper la tendencia descendente de las últimas vendimias, sin explicación concreta alguna por parte de la Mesa de la Pobreza.

Dicho antecedente ha llevado al Consistorio capitalino a ser cauto y seguir preparado de cara a lo que pueda venir. «Nos preparamos a máximos, es lo más humano; hacerlo a mínimos sería temerario», adelantaba la propia Patricia Sáinz a principios de verano a requerimiento de este periódico.

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