Eva Loza: «No es que yo haya dejado el PSOE, es que el PSOE me ha abandonado a mí»

Su asistencia despertaba un interés inusitado en un Pleno municipal y Eva Loza, sabedora de las circunstancias extraordinarias que rodeaban la jornada, no defraudó a los periodistas que la esperaban. Diez minutos antes del inicio previsto para la sesión, aparecía la edil en la puerta del salón municipal. Sola, algo acalorada, pero «más serena que nunca». Y a petición de los medios que aguardaban su presencia, Loza aceptaba ofrecer su punto de vista, justo después de cruzarse un instante con Luis Alonso, el portavoz municipal socialista, con el que no hubo ni un atisbo de complicidad.

Ya desde el comienzo, adelantó que no iba «a despejar la incógnita sobre el acta», pero sí incidió en los motivos que la han empujado a pedir la baja del Partido Socialista,, para descartar que estén relacionados con la enfermedad que ha padecido en los últimos años.

Acerca del acta, Loza subrayó que aún no iba a «despejar la incógnita» porque debe un respeto institucional al Ayuntamiento de Logroño y a trabajar por la ciudad desde la oposición. «A mí se me ha pedido públicamente el acta como a José Luis Ábalos, cuando este ha sido expulsado del partido por presuntos delitos, mientras que a mí no se me dan ni 24 horas de reflexión; es una falta de respeto a Eva Loza como persona», denunció.

«No me aferro a nada, sigo siendo concejala del Ayuntamiento de Logroño, porque el acta es mía y no he renunciado», insistió una Eva Loza visiblemente afectada que luego arremetía contra «la presión» que ha recibido desde el partido. «Yo diría que la decisión emocionalmente la tengo tomada ya, pero la tengo que explicar muy bien», alegó antes de remarcar que está «recibiendo unos 'feedback' muy positivos».

Sobre su baja del partido, Loza no la atribuyó sólo a la amnistía ni a la política de Sánchez, pero sí sugirió que han tenido parte de culpa de su decisión. También a la situación «insostenible», según afirmó, del grupo municipal y la poca resistencia a determinadas políticas que ha detectado en las filas socialistas en los últimos tiempos. «Esto no es un juego para mí, yo actúo desde mis principios que me llevaban gritando en las entrañas desde hace tiempo», explicó, para detallar que hace unos días decidió retirarse a Arnedillo para pensar y reflexionar: «Entiendo que estoy en una situación de no poder más mentalmente y me voy a pensar». Porque según desveló: «Una de las reflexiones desde hace mucho tiempo es qué pinto yo en el Partido Socialista. Yo no siento que estoy abandonando el Partido Socialista, yo siento que el Partido Socialista me ha abandonado a mí; y a muchos militantes y a muchos votantes».

También se cuestionó por qué el resto de afiliados «no alzan la voz ante el viraje tan brutal que atenta contra los pilares del Partido Socialista», y mencionó someramente a García Page y Lambán para añadir que ella pensaba «inocentemente que iba a haber una revolución dentro del partido y no la ha habido». «Yo siempre he peleado por el PSOE, siempre he defendido al PSOE en terreno hostil», argumentó en alusión al ambiente conservador que, circunstancialmente, ha rodeado su vida.

Visiblemente emocionada en algunos pasajes de su comparecencia, la concejala se mostró dolida al nombrar a Luis Alonso, el portavoz del grupo socialista. Dejó entrever que le causó mucho dolor el incisivo tono en el que Alonso exigió el miércoles su renuncia al acta: «Creo que le han obligado a hacer eso». Pero también rechazó la actitud del dirigente municipal:«Yo nunca hubiera actuado así con Luis Alonso, al que hasta hace dos días consideraba mi amigo».

Y en esa referencia a la dirección del partido, mencionaba explícitamente al secretario general de la formación socialista, Javier García, de quien admitió «no ser fan» ni haberle apoyado en su candidatura para liderar el partido. Pero sí desveló haber contactado hace unos días con él para pedirle un encuentro sin que él le ofreciera la respuesta que ella pretendía, para su decepción.

«Estoy sola y no tengo estrategia», apuntó Loza, que ya ha recogido sus enseres personales del despacho del grupo, mientras apretaba entre sus manos una foto enmarcada de su hija de seis años, su «única arma», según manifestó con la voz entrecortada.

• Temas
• Logroño
• Ayuntamiento de Logroño
• Partido Socialista Obrero Español (PSOE)