«Densa en su extensión y escasa en su argumentación». Así se ha referido el alcalde de Logroño, Conrado Escobar, a la resolución definitiva del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible desestimando los cambios introducidos en hasta tres proyectos 'heredados' del anterior mandato financiados con fondos de la UE.
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Ello ha llevado al primer edil a querer hacer ver que se trata de una resolución más política que técnica, y diciéndolo sin decir no ha dudado en centrarse directamente en la figura del ministro del ramo, el socialista Óscar Puente. Posteriormente, ya en la nota de prensa oficial para dar cuenta de sus declaraciones se hablaba abiertamente de «un ataque a la ciudad de Logroño».
«El actual equipo ministerial de Óscar Puente ha desestimado todas las alegaciones, que no han merecido la más mínima consideración positiva», ha dicho para recordar que «nosotros estamos gobernando legitimados por una consistente mayoría y hemos sido previsibles, consecuentes y responsables».
Escobar, acompañado por hasta cinco de sus concejales, Francisco Iglesias, Miguel Sáinz, Leonor González Menorca, Íñigo López-Araquistáin y Ángel Andrés, ha lanzado un mensaje claro. «Óscar Puente no nos tiene que decir cómo gobernar Logroño», ha espetado para sentenciar que «Logroño se gobierna desde Logroño, no desde un despacho del Ministerio».
El primer edil logroñés, tras reconocer que «estamos ante un escenario que nosotros no deseábamos, el de la confrontación, el de a ver quién puede más, el del conflicto; visto el texto tenemos que lamentar que esto ya no va de 100 metros de carril bici, va de revisar los elementos más elementales que rigen la democracia».
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Así, ha insistido en el relato de la autonomía municipal olvidando que esa misma autonomía llevó en su día a pedir fondos para unos proyectos y no otros. «Logroño decide con los logroñeses qué modelo de ciudad quiere, cómo quiere su ciudad; y los logroñeses han hablado, hace año y pico, y volvieron a hacerlo en las europeas, y no hace falta insistir en ello pero es conveniente tenerlo presente».
«Hablamos de una institución democrática que se rige por las urnas, y este equipo de gobierno está legitimado para seguir la hoja de ruta que dijo que iba a seguir y a nadie le puede sorprender. Logroño se gobierna desde Logroño y con los logroñeses, y con todo el respeto Óscar Puente no nos puede decir cómo hacer las calles en nuestra ciudad o cómo tiene que ser tal o cual avenida...», ha añadido.
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Escobar, de paso, reclamó a la oposición «un ejercicio de colaboración y respeto, porque los logroñeses ya han hablado». Una reclamación que, de entrada, se ha topado con sendos comunicados por parte del PR+ y de Podemos, ambos del grupo mixto. Así, Rubén Antoñanzas ha solicitado a Escobar «que demuestre que sabe tomar buenas decisiones rectificando sobre el carril bici de avenida Portugal» para que «no nos aboque a un proceso judicial largo, costoso y de futuro incierto para Logroño y evite la sanción». Por su parte, Amaia Castro, ha exigido la dimisión inmediata del alcalde por «su gestión desastrosa».
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