El Ebro se tranquiliza

Pasadas las 21.30 horas, SOS Rioja se hacía eco de la CHE e informaba de que «el máximo de la crecida del Ebro» iba a Mendavia. Lo que significaba, que ese nivel de agua ya había pasado por la ciudad de Logroño y desde ese momento la reducción del nivel empezaría a apreciarse. La bajada del caudal será «muy clara durante la próxima noche y durante toda la jornada de este sábado», apuntaba.

A la misma hor, el nivel en Castejón era estable, pero allí sí se espera un nuevo repunte este sábado cuando llegara el agua de Mendavia, según transmitía el SOS. En este último comunicado del día, se añadía que en el Ega la situación «ya era de normalidad y no se esperaba, a corto plazo, nuevos repuntes».

Durante la jornada, el caudal del Ebro en Logroño se situó en 1.207 m3/sg y el aviso fue naranja, que significa 'riesgo importante'. La tendencia era de subida, pero más lentamente de lo que se esperaba. La CHE explicaba que los caudales del Ega en Andosilla, Arga en Funes y Aragón en Caparroso ya estaban al principio de la tarde a la baja, lo que iba a favorecer el caudal del Ebro cuando llegara a Alfaro.

Entre las incidencias del día se encontró el aeropuerto de Agoncillo, a donde no pudo llegar el avión de Madrid que fue cancelado, ya que la pista riojana estaba anegada por lo que no saldrá tampoco el de este sábado.

El helicóptero de la Guardia Civil captó estas impresionantes imágenes tomadas en la mañana de este viernes en las que se veía el alcance de la crecida.

A primer ahora de la mañana de este viernes, el Ebro ya había ocupado toda la zona inundable , donde Protección Civil y Bomberos estuvieron trabajando. Además, había un garaje clausurado y en el Rincón de Julio estaban achicando agua desde ayer por la tarde.

En el Adarraga, los responsables esperaban que no hubiera problemas y en el caso de Las Norias, el único problema era que estaban achicando agua de la sala de bombas de la piscina de chapoteo ya que ha habido filtraciones. Tampoco en la Casa de las Ciencias hubo problemas y la actividad se desarrolló como un día normal, según informaban los propios trabajadores, según informó Luis Javier Ruiz.

El concejal Pedro Sáez Rojo indicó que el dispositivo de vigilancia del río Ebro, en el que participan efectivos de Protección Civil, Bomberos y Policía Local, seguiría por el momento «activado» hasta que se estabilizara la crecida lo que se estimaba que ocurriera por la tarde.

Según explicó el edil, el caudal del río alcanzó a las 10.30 horas los 1.194 metros cúbicos por segundo y superó una altura de 4,60 metros. Así las cosas, aún se esperaba un caudal mayor pues la crecida no había llegado a su máximo en la capital riojana. De hecho, las estimaciones municipales basadas en la información proporcionada por la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) señalaban que el caudal podía alcanzar los 1.300 metros cúbicos por segundo.

Por eso, Sáez Rojo hizo hincapié en que se vigilara constantemente y se estuviera en contacto directo con las zonas que suelen inundarse cuando se producen este tipo de crecidas, como la zona del Adarraga, la Hípica, el camping, la urbanización Ciudad de Santiago o el restaurante El Rincón de Julio, donde se ya se había instalado una bomba para extraer el agua en caso de necesidad. Informaba Nuria Alonso.

Por otro lado, al Ebro, que bajaba cargado, le costaba asumir todo el caudal que proviene del Iregua en su desembocadura. Como se puede ver en las imágenes y en el vídeo, esta zona fue una de las más afectadas y las zonas de paseo y de juego hasta las que habitualmente no llega el agua se encontraban anegadas.

Así se vivió la mañana en las cabeceras de comarca de La Rioja, mirando al Ebro. Esto era lo que explicaban los compañeros de Diario LA RIOJA en la zona.

En Haro, aunque la rotonda de acceso a la ciudad de Haro desde la N-124 en el barrio de las bodegas sigue inundada, e incluso ha visto subir el nivel del agua durante la pasada madrugada, la policía local ha proporcionado un desvío provisional, sólo de salida y para turismos y furgonetas pequeñas, utilizando el arco del puente por el que pasa el ferrocarril y que une la Avenida Costa del Vino y la Avenida de Vizcaya. Desde el Ayuntamiento de Haro informan que de momento la situación está controlada pero que siguen los dispositivos alerta ante una pisible subida en la tarde de hoy. Informa Óscar San Juan.

La primera crecida del Ebro en este invierno encontró en su tramo alfareño con la reconstruida defensa en el soto del Estajao, a la altura de los pozos de captación del municipio, que se mostró sólida ante un caudal que alcanzó su pico con 1.533 metros cúbicos por segundo a las 8 de la mañana, según informa Ernesto Pascual..

Fue el momento de mayor aporte de los ríos navarros, sobre todo del Arga una vez que el Aragón está contenido por el llenado invernal del pantano de Yesa. A lo largo de la tarde, la tendencia fue descendente, aunque las previsiones de SOS Rioja indicaban que volvería a haber un pico sobre las 3 de esta pasada noche. Eso sí, confiaban que el nuevo aporte de los ríos navarros no coincidiera con la crecida que llevaba el Ebro desde Logroño.

Reunidos a pie de defensa responsables de Policía Local, Confederación Hidrográfica del Ebro y SOS Rioja, apuntaban la tranquilidad ante una mota que estaba respondiendo como se esperaba tras su reconstrucción con roca, arena y otros materiales durante este invierno, rehaciéndose de las roturas y mordidas que sufrió en la crecida extraordinaria del pasado 13 de abril.

Una vez superados los 1.000 metros cúbicos por segundo se activó el caudal de alivio, lo que expandió la lámina de agua y frenó el impacto del caudal contra la defensa que colinda con los pozos de captación. Eso sí, las filtraciones volvieron a darse, quedando anegadas las choperas al otro lado de la defensa. Además, esas filtraciones ocasionaron grietas en la defensa rellenada del mazón de los Cantines, ya lejos del cauce.

Desde Calahorra informa Isabel Álvarez, que explica que la Comunidad de Regantes no cree que vaya a haber incidentes. Solo hay una chopera junto al río que está inundada pero es algo que ocurre habitualmente debido a las filtraciones.

El Ayuntamiento calagurritano espera la punta de la crecida a su paso por la ciudad a las 22 horas de este viernes. Por seguridad, ya se han cortado algunos accesos para evitar problemas posteriores.

Ya en la mañana del jueves había emitido un aviso de un aumento «notable» del caudal del Ebro durante el jueves y el viernes. Según explicaba el órgano hidrológico, el aumento viene provocado por las precipitaciones registradas desde el pasado martes.

En esta primera jornada complicada, el aumento se notó especialmente en la zona burgalesa, sobre todo en la zona de los afluentes de la margen izquierda (Nela, Trueba, Jerea y Omecillo), pero como es evidente ese aumento supone lo propio en el mismo Ebro.

Así, el caudal registrado en Alfaro pasó de 339 a 812 metros cúbicos por segundo en 12 horas.

En Logroño, el Ebro superó los 650 metros cúbicos por segundo, cuando sobre la medianoche pasada estaba en 319. El río pasó de 131 m3/sg a las 18 h del miércoles a 705 m3/sg a las 15 h. del jueves, con tendencia ascendente. A las 14:30 un nivel de 3'24 metros en la estación de aforo situada en la Casa de las Ciencias.

El río Ebro a su paso por Logroño recuperó a lo largo del jueves su tradicional aspecto invernal. El caudal creció notablemente y la corriente era alta. En la mañana de este jueves el agua se había instalado en la 'zona inundable' por vez primera desde la primavera del año pasado y la pequeña cascada que forma la presa de la minicentral eléctrica había vuelto a rugir creando un espectáculo digno de observación.

La isla Soto, entretanto, había ocultado su contorno ante la crecida del agua, mientras las cigüeñas observan en calma desde lo alto de sus cinco nidos que ocupan las parrillas artificiales instaladas. El nivel del Ebro seguirá subiendo en los próximos días y los logroñeses van a ser testigos de nuevo del protagonismo del río en la vida de la ciudad.

Información elaborada con los datos aportados por Luis Javier Ruiz, Isabel Ávarez, Óscar San Juan, Ernesto Pascual y Nuria Alonso.