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El problema está ahí... aunque no se vea. Subterráneo... hasta que aflora a la superficie. De hecho, empieza nada más tirar de la cadena del váter. Las toallitas húmedas arrojadas al retrete son una de las mayores amenazas para la red de saneamiento urbano. Y es que, como no se descomponen fácilmente contrariamente a lo que pasa con el papel higiénico, terminan haciéndose 'madejas' que ponen en jaque a los sistemas de alcantarillado.
Toallitas, pañales, compresas, bastoncillos... junto a trapos y otros tejidos acarrean graves problemas en los colectores (montañas de fibra no disuelta acaban en ocasiones colmatando sistemas y provocando obstrucciones de muy cara resolución). El uso del inodoro como cubo de la basura tiene consecuencias y lo aparecido durante la limpieza del sifón del soterramiento no es más que un ejemplo.
He aquí el recorrido por el subsuelo entre las estaciones de trenes y autobuses de la capital de La Rioja, donde se pensaba que había muchos menos desechos de los que finalmente ha habido que 'diluir' con diferentes técnicas y no sin esfuerzo (con fotografías cedidas por la sociedad de integración del ferrocarril de Logroño LIF2002).
Las primeras comprobaciones del sifón en cuestión se realizaron por parte de buzos profesionales a finales de marzo, que inspeccionaron la cantidad y profundidad de los depósitos acumulados.
Se trata de un sifón de aguas pluviales, si bien durante los primeros cinco años funcionó con aporte de aguas fecales... Los buzos no pudieron actuar como se pensaba en un principio por razones de seguridad.
El equipo encargado de la limpieza ha estado formado por un jefe de operaciones, un jefe de buceo y bombeo, cuatro técnicos buceadores y dos técnicos en bombeos... todos con trajes químicos y protegidos en todo momento.
'Materiales blandos' procedentes del depósito de las partículas en suspensión que se produjo durante el funcionamiento transitorio del sifón sin la derivación de las aguas residuales al colector de Pedregales, que sedimentaron a lo largo del tiempo en los diversos compartimentos del mismo.
Se estimó que, por su procedencia, estos materiales podrían ser diluidos mediante la incorporación de agua a presión al sifón; siendo esta mezcla de carácter más fluido posteriormente evacuada aguas abajo a través del colector de Colón.
Sin embargo, la previsión inicial de material acumulado se quedó corta y ya en el comienzo de las tareas de limpieza se comprobó que el mismo, sobre todo de toallitas, era muy superior al estimado.
«Los buzos no podían entrar al ser aguas fecales, por lo que hubo que tirar de bombas, que no dieron resultado, pasar a un sistema de dragados 'venturi', que ha sido la clave, y terminar usando pala, legón y carretilla para 'diluirlo' todo dentro de la propia red», reconocen los protagonistas.
Iñaki Beldarrain, al frente de la empresa Beldarrain Asesoramientos Marítimos (BAM), en el inicio del tramo bajo las vías del tren. Beldarrain es un experto en operaciones especiales y en la lucha contra la contaminación, limpieza y reflote de embarcaciones.
Hay que destacar y llamar la atención sobre el mal uso que hacemos de las toallitas, compresas, bastoncillos... que son evacuados por el inodoro, ignorando el problema que supone su acumulación en la red de saneamiento urbano.
Finalmente, tras dos meses sacando residuos de los conductos y de los pozos, los trabajos de limpieza finalizaron a primeros de mayo. El volumen total de desechos retirados del sifón se estima en 450 metros cúbicos.
AUX STEP FOR JS
El sifón de Colón, o del soterramiento, consta de varias partes: la cámara sur es la de admisión, y a ésta llegan las aguas pluviales de la red separativa del suroeste de la ciudad (situada en la rotonda de Miguel Delibes con Colón); la reja de desbaste situada en esta cámara evita la entrada de materiales gruesos; dos tubos de 1.200 mm conectan la cámara sur con un pozo intermedio que discurren por debajo del aparcamiento de la estación de autobuses; de la cámara intermedia parten dos colectores de 2 metros por 2 metros a 10 metros de profundidad, que cruzan por debajo las vías férreas; y que llegan hasta la cámara de reunión situada bajo la cúpula de la estación intermodal y conecta con la red municipal de saneamiento
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