Conrado Escobar | Alcalde de Logroño

«Sigo confiando en la lealtad de todos los ministerios para mantener los fondos europeos»

–Dada la prisa de hace un año, sorprende que no estén en marcha las obras de las Cien Tiendas

–Administrativamente están en marcha, las obras de urgencia están hechas y ahora toca hacer lo otro. Se va a hacer. A finales de año, principios del que viene.

–Si nos ponemos en esas fechas, quiere decir que ya no contamos con los fondos europeos

–Yo creo que sí porque estamos hablando con el ministerio para ajustar el porcentaje de lo que se puede aprovechar y de lo que no. Estamos con artesanía fina de los porcentajes y no va mal. La primera parte, Beti Jai, puede empezar antes de fin de año y así aprovechamos la obra de Duquesa y La Glorieta. El proceso puede hacerse con cierta lógica. No será todo a la vez, sino fase a fase.

–Sospecho que tampoco llegamos a tiempo para aprovechar los fondos europeos de San Antón. El plazo acaba en unos días

–Hay dos peticiones, una de la Federación de Municipios, de la que he formado parte para que se inste a una prórroga para muchos ayuntamientos porque hay muchos en la misma situación y espero contar con la sensibilidad del Ministerio. Teníamos una dificultad añadida porque no encontramos nada parecido a un proyecto. Ha habido que hacerlo con muchas sensibilidad porque es un pulmón comercial y no podía pasar lo mismo que en Cien Tiendas. Los fondos europeos son el instrumento al servicio de un objetivo, que es que la calle quede bien.

-Este no es el ministerio de Óscar Puente ¿no? (El de Transporte ha rechazado provisionalmente los cambios en tres proyectos)

-Sigo confiando en la lealtad absoluta, en el de Óscar Puente y en todos los ministerios. En temas que ya se están ejecutando hemos encontrado sintonía absoluta. En la plaza de abastos, en la vieja estación de autobuses, en el Teatro Bretón aunque este va por otros derroteros. Estamos siguiendo una hoja de ruta razonable. Puede haber diferencias pero siempre puede haber puntos de encuentro.

-Y empieza la obra de la calle Sagasta

-Todo sigue el curso que se había planteado con el Ministerio, se le ha ido haciendo partícipe de todas las incorporaciones. La esencia del proyecto se mantiene. Al final va a ser una calle que va a seguir cumpliendo su función de conexión con la zona Norte pero también incorpora un concepto más amable, más peatonzalible.

-Dadas las subidas y bajadas que se prevén en la calzada, los coches van a tener que ir despacio, eso sí

-Van a tener que ir despacio pero van a ir porque, hoy por hoy, no hay alternativa a ese puente, tiene que cumplir su finalidad.

-El centro histórico, en domingo por la mañana, está lleno de personas con maletitas

-Estamos en el punto crucial para que el Casco Antiguo florezca, por paradójico que pueda parecer. Es verdad que ahora dificultades en torno a cuestiones relacionadas con el ocio, el uso de las terrazas, pero también hay una parte muy positiva. Después de muchos años, los peris (planes especiales) están dando sus frutos y hay más gente que vive y nuestro objetivo es que haya aún más. Estamos trabajando en cada solar del Casco Antiguo para que se transforme en vivienda. Es verdad también que el Casco Antiguo ejerce más atracción para el turismo y eso va a seguir siendo así. Tenemos que buscar el punto de equilibrio, aunque a algunos no les gusta que hable de equilibrio, porque no se trata de plantear batallas sino de buscar espacios para que todo el mundo pueda convivir. Lo que tiene que consumir más esfuerzos por nuestra parte es que las condiciones de habitabilidad sean las mejores, pero lo primero es que haya vivienda.

-A más viviendas, más reclamaciones de habitabilidad

-Es una zona residencial pero es el Casco Antiguo y hay un peso de una determinada hostelería que no creo que sea perjudicial si es complementaria de la actividad comercial y de la vivienda. Es un activo más. Por algo somos la mejor ciudad para tapear, no perdamos de vista esto porque es empleo y economía y, si no lo hay, mal nos va a ir.

-Lo que piden distintas instancias es que se cumplan las normas ¿Por qué es tan difícil?

-Creo que se están cumpliendo. Si desde enero hay más de mil sanciones porque se ha incumplido la ordenanza de convivencia, eso es porque se está intentando que se cumplan las normas. En paralelo hemos iniciado una campaña para que el ocio sea razonable y que el primero que ponga filtro es el que va a participar del ocio y esa campaña está funcionado. Los últimos datos nos dicen que está bajando la intensidad en el mal uso del ocio, en el incivismo. ¿Hay que seguir trabajando? Por supuesto. También se han introducido mejoras claras para que la recogida de residuos sea mejor y perjudique menos a las personas que viven en el Casco Antiguo. Y lo más importante es que estamos en contacto directo con todos. No se puede negar con datos que algo se está haciendo.

-¿En qué se va a notar que ya hay dos zonas de especial protección acústica? (Centro histórico y La Zona)

-Primero en que se cumplen las normas. ¿Tan difícil era que no tuviéramos aún declaradas estas zonas desde la pasada legislatura? Ahora se tiene que cumplir lo que está previsto, unas medidas complementarias. Pero el primer paso es declararlas y se ha dado. hemos completado todo el mapa normativo que exigía la ley. Lo hemos hecho este año, con buen respaldo de los grupos.

-¿Habrá Bosonit en la calle Mayor 20?

-No lo digo yo. Lo ha dicho la empresa. Para que sea posible, el trabajo ha sido muy intenso. Gratamente sorprendido por la implicación de las unidades municipales y hay que reconocer que la empresa ha puesto todo de su parte para entender las razones que confluían. Se ha buscado una solución muy razonable para todos, la ciudad y su patrimonio y la empresa y muy favorable para la activación del Casco Antiguo. Es ocupar una parcela con un proyecto empresarial y otra con un proyecto habitacional en una zona especialmente delicada como es la Villanueva.

-¿Ha hablado con Álvaro Siza (autor de un plan para la Villanueva en 2005)?

-He hablado con su socio, Juan Miguel Hernández León.

-¿Y con Tuñón? (ganador de un proyecto en 2003)

- Con Tuñón para la zona del Revellín.

-¿Son espinitas que se le quedaron de tiempos pasados?

-La ciudad es siempre un proyecto inacabado. Un proyecto pudo ser en su día fuera de escala, pero una parte puede ser muy razonable y es ahora cuando le toca abordarse. La ciudad tiene su ritmo. Es un ejercicio de responsabilidad comprobar lo que de bueno tengamos ya en el Ayuntamiento. Es razonable aprovechar ese talento que estaba por ahí.

-El sábado estrenaba Bilbao su zona de bajas emisiones ¿Qué plan tenemos?

-Estamos en la licitación, estamos en tiempo. Lo que tengo claro es que Logroño, con los indicadores que tenemos, no es una zona especialmente conflictiva. Todo Logroño. Otra cosa es que haya que cumplir la ley y establecer la mejor ubicación pero nuestra calidad del aire es alta, nuestro nivel de ruido es razonable, partimos de mejor posición que Bilbao.

-Se van a aprobar los criterios que articulen la revisión del Plan General, pero ya se aprobaron unos en 2021 y por unanimidad ¿Por qué otra vez?

-Porque las circunstancias han cambiado, porque así lo hemos decidido con el resto de los grupos y porque vamos a darle un empujón a la revisión del Plan General con Ezquiaga (el equipo que ya se venía empleando). Hay aspectos que son fundamentales, que toman más consistencia, el suelo industrial y la vivienda. Esos son los dos aspectos que más han pesado a la hora de articular la revisión de los criterios.

-Para esta legislatura se nos echa el tiempo encima

-La aprobación definitiva la veo difícil, pero inicial o provisional, seguro, pero hay que trabajar. El Plan general es el típico trabajo que a nadie le gusta porque no se ve. No podemos tener la ciudad así ni estar al albur de modificaciones puntuales. Es mejor tener un criterio de modelo, de todo, para los próximos 25-30 años. E insisto mucho en el consenso porque la Corporación puede cambiar pero el urbanismo necesita estabilidad.

-¿Por qué nunca se explicó qué escudo de la ciudad se aprobaba?

-Es un debate un poco artificial. El planteamiento es razonable. El escudo que todos conocemos es el que se va a emplear

-Pero no el que se va a aprobar

-Hay un escudo histórico y un escudo usado, el popular. Al escudo histórico no se puede renunciar, el escudo histórico está, pero hay otro que se emplea. Si hablamos de proteger nuestro patrimonio, nuestro escudo, el de Carlos V, hay que protegerlo.

– ¿Hay que regular las degustaciones?

-Lo que sí que tienen es que cumplir con las normas sanitarias por la salud de todos. entiendo las quejas de los hosteleros, son fiestas y se puede plantear incluso que sean actividades complementarias.

-Está en revisión la ordenanza de terrazas. No van a ser más grandes de lo que ya son, ¿no?

No, el criterio que se va a seguir que es el que dicta el sentido común es que sean proporcionales al superficie del local más o menos y que tengan la mejor estética posible. Eso está hablado con los hosteleros y de esta forma ganamos todos. El buen hostelero es el principal interesado en que la ciudad esté limpia, en que las terrazas sean estéticamente apropiadas, que no molesten... es un aliado de la ciudad.

-¿Qué tal van los polígonos?

-El más avanzado es el de Las Cañas. Esta semana daremos información más administrativa. Se va a mejorar la electrificación, el alumbrado, con 3 millones de euros porque también vamos con el Gobierno de La Rioja. Las Cañas es el que más imperiosamente necesitamos porque es el que más capacidad tiene para acoger empresas. El suelo industrial no había estado presente en la agenda política ni urbanística. Vivíamos de espaldas a los polígonos. Si no cuidamos la industria no tendremos oportunidades para la gente joven.

-¿De qué está más orgulloso de este año?

-Del equipo, de la ciudad, de la ilusión que se vive en la calle. En fiestas de San Mateo y de San Bernabé he respirado tranquilidad, normalidad, cordialidad. Tenemos un propósito común de ciudad que se articula en varios proyectos, que son todo lo que tiene que ver con la vivienda, con una ciudad comercial, con el suelo industrial, con la circularidad.