Un concurso de ideas definirá el centro polivalente e intergeneracional de la antigua estación

Y hasta un segundo. «Un centro polivalente con una función eminentemente social con una importante oferta deportiva que permita esa mezcla intergeneracional, de mayores, de jóvenes y de infancia... Podemos dar, por ejemplo, servicio a las personas mayores que cuidan de sus nietos con ludoteca que, además, incluya biblioteca, salas de estudio o de lectura».

Así lo trató de explicar ayer la portavoz del equipo de gobierno municipal, Celia Sanz, quien acompañada del concejal regionalista, Rubén Antoñanzas, dio cuenta de la considerada primera reunión de trabajo para definir concretamente el proyecto de regeneración de los bajos del edificio de la antigua estación de autobuses -más su plaza interior-, sin servicio desde la puesta en marcha de la nueva. Una reunión de trabajo que ya tiene una medida inicial: un concurso de ideas dará forma a la propuesta final.

El alcalde de Logroño, Conrado Escobar, y miembros de su ejecutivo, se reunían con el edil riojanista, Rubén Antoñanzas, para, según lo anunciado en la previa, «avanzar en la definición del proyecto de centro polivalente e intergeneracional para la antigua estación de autobuses». Y ello porque desde el PP se ha tendido la mano al PR+ habida cuenta de que ya presentó una idea que fue la que sirvió para captar 2,6 millones de euros de fondos europeos. Así, si Antoñanzas estaba agradecido por contar con él, Sanz hizo lo propio por 'ceder' sus aportaciones -fruto de un trabajo de dos legislaturas- reconociendo tanto el regionalista como la popular que las ideas de ambos pueden ser compatibles y, por tanto, lo del mandato pasado es aprovechable al menos en parte.

Así, y si bien nadie sabe precisar si el vestíbulo de la vieja terminal será rehabilitado como un salón de baile y el patio de dársenas, finalmente, albergará una piscina, del encuentro sí que salió aprobado un calendario de futuro: «La idea es a mediados o finales de diciembre tener resuelto el citado concurso de ideas para lograr adjudicar el mismo ya en la primavera de 2024 a fin de comenzar las obras el próximo verano y concluirlas en el verano de 2026». Los técnicos de la casa, según explicaron, ya trabajan en ello.

Para el citado concurso de ideas, que tendría que convocarse sin tiempo que perder, se formará un jurado «de cuatro o cinco personas» entre las que, según Sanz, deberán estar personas de perfil social que valoren esa parte; técnico, con mención expresa al decano del COAR; y personas implicadas en el festival Concéntrico, para tener en cuenta lo que debe significar el futuro centro en su entorno (aspira a convertirse, palabras textuales, en un «corazón de la ciudad en pleno centro»).