Un contenedor, de los que se acaban de distribuir en el centro histórico, acabó en el río junto a la minicentral. SÜLEYMAN EVRÁN/ SADE VISUAL
Logroño

Los comportamientos incívicos y sucios han motivado este fin de semana 60 sanciones

Buena parte de las multas han tenido que ver con orinar en la calle, aunque también se investiga cómo llegó un contenedor al Ebro

Martes, 30 de abril 2024, 07:30

El fin de semana ha dejado en Logroño, entre otras imágenes, un contenedor flotando en el Ebro –de los que se han desplegado en el centro histórico de la ciudad–, y sacado del río por efectivos del parque de bomberos. Por este ... caso, que se está investigando, no se han producido sanciones todavía, pero sí se ha multado a cuatro personas por deteriorar bienes de servicios públicos. En este capítulo entran los daños a las obras de Concéntrico que este fin de semana se han desplegado por distintas zonas de la ciudad. ¿Cuánto? 210 euros la broma.

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En total, entre los días (con sus noches) del 26 y 27 de abril, la Policía Local ha puesto 60 multas por actuar contra las ordenanzas municipales de la ciudad. La mayor parte de ellas –42– se adjudicaron a personas que orinaron en plena calle y, en un caso más, incluso se sancionó a alguien defecando. En todos estos casos, las sanciones alcanzan los 301 euros.

Por vociferar, cinco personas más tuvieron que pagar 100 euros, los mismos que otras cinco personas sancionadas dentro de ese capítulo que se da en llamar 'otros motivos'. En tres casos más se atendió el ruido en domicilios, con penalizaciones de 100 euros, así como casos relacionados con drogas y que serán tratados por la Delegación del Gobierno.

Miccionar en plena vía pública conlleva una penalización de 301 euros, mientras que vociferar supone pagar 100 euros

Las sesenta sanciones por acciones contrarias a las normas locales fueron incluso más el fin de semana anterior, cuando alcanzaron 88, la mayoría también por orinar en la calle.

Estas cifras vienen siendo una constante en los últimos tiempos, junto a las quejas de los vecinos del centro histórico, que han de soportar un ocio nocturno vociferante y sucio que les impide el descanso, aunque algunas de estas situaciones también se dan en otras zonas de la ciudad.

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Desde principios de año, las sanciones por conductas contrarias a las ordenanzas de fomento de la convivencia, limpieza y animales, superan las 550.

Hasta el 17 de abril, fueron 407 y, de ellas, de las 227 relacionadas con limpieza, hasta 212 lo fueron por orinar en la vía pública, cuando todo el año 2023 terminó con 60 expedientes de este tipo, según la memoria de la Policía Local. Un fin de semana de los de ahora prácticamente equivale a todo el año pasado en esta materia.

Ni la fachada norte de La Redonda ha librado estos últimos meses de convertirse en urinario público. Estos últimos días se han movido los contenedores que se encontraban junto a la pared de este edificio que, por cierto, cuenta con la máxima protección en las normas urbanísticas municipales, para tratar de alejar a quienes se acercan a la misma a miccionar. Está por ver el éxito de esta medida, también reclamada con insistencia por los residentes del entorno.

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También hasta mediados de abril, en lo que a comportamientos incívicos se refiere, en 35 ocasiones las sanciones tuvieron que ver con despedidas de soltero.

En hasta 23 casos fue por comportamientos como vociferar en la calle, aunque diez sanciones incluso se relacionaron con situaciones que perturbaron gravemente la convivencia ciudadana, la mitad, en tres meses y medio, de las que se dieron en todo el año pasado, que fueron 19. Este año incluso tuvo lugar una intervención en un apartamento turístico, en pleno centro de la capital, en un caso de turistas que intentaban tirar muebles por una ventana.

En estos primeros tres meses y medio de año, los ruidos en domicilios han llegado a suscitar 76 multas.

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