Y bomberas, ¿para cuándo?

Coincidiendo con el concurso-oposición que estos días se está celebrando en la ciudad y al que se presentó una única aspirante, desde el Consistorio anuncian un estudio para comprobar «qué tipo de barreras» se están dando y «reconsiderar el modelo de selección con el fin de adecuar las pruebas físicas si fuera necesario». «No se trata de cambiar de la noche a la mañana el sistema, sino de hacer una primera reflexión, ver qué cuestiones se pueden insertar, incorporar a las bases y, para ello, lo mejor es preguntar a los que saben, que los implicados nos realicen una valoración que ayude a determinar qué pruebas se ajustan mejor», señala Eva Tobías, responsable de la Concejalía de Alcaldía e Igualdad que enmarca esta medida dentro del objetivo que se ha propuesto este ayuntamiento de impulsar las políticas de igualdad. «Una de las políticas de igualdad es el acceso al empleo y la promoción interna y, en el caso de sectores como policía local o bomberos, están mayoritariamente masculinizados», señala la responsable.

Todavía es algo incipiente («acabamos de llegar y tenemos mucha cosas sobre la mesa», dice), pero el primer paso ya lo han dado y ha sido contactar con una asociación nacional que lucha por cambiar las pruebas de acceso, una barrera, que como señala Tobías, hace que las mujeres no sean ni el 1% del cuerpo. La asociación la promueve Inés Suárez, una bombera forestal que ha denunciado la discriminación que sufren en la actualidad. El Consistorio ha entrado en contacto con ella con el fin de intentar ver si las quejas que plantean tienen reflejo en las oposiciones que viene convocando el Ayuntamiento de Logroño. «Llevamos 40 años con unas pruebas físicas que son inaccesibles para las mujeres», resumen.

Desde esta plataforma, respaldada por 40 bomberas de toda España, consideran que las marcas mínimas son extremadamente difíciles para las mujeres, y, si bien dejan claro que la forma física es importante, piden un estudio que determine cuáles son las que mejor garantizan un buen servicio. Además, dicen, hay 132 cuerpos de bombero y en cada sitio se hacen unas pruebas diferentes.

Por lo que respecta a La Rioja, mujeres y hombres realizan las mismas pruebas físicas para el acceso. Eso sí, en algunas disciplinas de resistencia y atletismo reciben una bonificación de un punto y las marcas mínimas exigidas son más bajas para ellas. La cuestión es determinar, aun así, si los registros que se piden a las opositoras siguen siendo inaccesibles.

Éste es precisamente el punto de partida del estudio que plantea el Ayuntamiento y, sin llegar a conclusiones precipitadas, Tobías ve elocuente el hecho de que de los 103 inscritos iniciales a las oposiciones de Logroño solo se haya presentado una mujer (abandonó en la primera prueba).

«El hecho de que se desanimen por la dificultad de los ejercicios es un factor, pero también hay que plantearse que igual no hay mujeres por no tener referentes y esto tiene mucho que ver con cómo se educa a los hijos desde pequeños..., aún hay muchas cosas que incorporar y trabajar desde la base». Para la edil, Reino Unido es una referencia, con un alto porcentaje de bomberos y otro sistema de acceso.