Avenida de Portugal, la rotonda de Murrieta y la renuncia al voladizo de la A-13, las polémicas ciclistas

Tras las críticas como oposición, Conrado Escobar se comprometió a revisar parte del eje ciclista, con la primera actuación al poco de llegar a la alcaldía: en agosto con la supresión del carril bici de avenida de Portugal. La imagen de los operarios eliminando la vía ciclista para restituir el segundo carril de circulación a motor, y la consecuente doble fila, levantó polvareda. Tanta que el Ministerio advirtió de la posible pérdida de 6,5 millones de euros de fondos europeos de las actuaciones de movilidad por estas modificaciones sin comunicar y que incumplían las bases de la convocatoria de ayudas. Esta cuestión sigue sobre la mesa, aunque Ayuntamiento y Ministerio parecen haber acercado posturas.

En diciembre, la siguiente novedad del eje este-oeste fue el cambio en la prioridad de la 'turbo rotonda' de la fuente de Murrieta, que obligaba desde entonces a los ciclistas a ceder el paso a los coches, perdiendo la prioridad que tenían. Las últimas denuncias llegaron después de que, en febrero, se descartase el proyecto de puente voladizo hacia el polígono Cantabria, que beneficiaba a los peatones y ciclistas de la zona este, y que contaba con 339.100 euros de fondos asignados. La futura conexión por avenida de Mendavia solucionará, según el consistorio, esta ruta.