El año del dragón de madera empieza también en Logroño

La plaza del Mercado ha sido el escenario elegido este domingo, en pleno Carnaval, para dar la bienvenida al 4722 con una muestra de una cultura tan milenaria que ha congregado a un nutrido grupo de vecinos y vecinas de la capital autonómica.

Así, por el escenario han podido verse bailes de niños pequeños, de parejas, de niños mayores, en grupos de adultos, todos ellos con el traje tradicional chino; el baile del dragón, la danza del león, una exhibición de taichí y, todo ello, aderezado con carpas en las que se han desarrollado talleres de caligrafía, manualidades, catas de té y una degustación de auténticos raviolis y fideos chinos.

El Año Nuevo Chino se conoce comúnmente como la Fiesta de la Primavera, ya que marca el final del invierno y el comienzo de la citada estación.

«Siempre cae en la segunda luna nueva después del solsticio de invierno; todas las culturas celebraban la llegada de la primavera como el renacer de la vida, volvemos a sembrar, las flores vuelven a brotar y nos llegan los frutos de la naturaleza, y en China se sigue haciendo», explica Daniel García, riojano casado allá que, tras regresar a la tierra, abrió una academia de chino junto a su esposa.

Ellos, que celebraban habitualmente tal fecha en la academia, se han unido este año a Nieves Ye, presidenta de la Asociación de Amigos de China en La Rioja, quien también ha sacado los festejos de su restaurante, para compartirlos y hacer partícipe a la sociedad logroñesa. «China está de moda, pero sigue siendo una gran desconocida, y eventos de este tipo sirven para integrar más a la comunidad», explican.

Y lo que empezó como una idea para una «pequeña fiesta a pie de calle», según cuentan, ha terminado siendo en la tarde de este domingo una «puerta abierta» para conocer un poco mejor al gigante asiático y a sus gentes, que desde hace años conviven «puerta a puerta» en la ciudad de Logroño.