A los niños del Sáhara aún les faltan 27 familias

Los colectivos implicados en el programa humanitario de 'Vacaciones en Paz' buscan hogares en La Rioja, conLogroño a la cabeza, para recibir a los menores saharauis un verano más. «Queremos que 40 niños y niñas sean recibidos este verano, pero aún nos faltan 27 familias», explica Mohamed Labat Mustafa, delegado del Frente Polisario en La Rioja.

«Nuestra pretensión es que este verano de 2024 vengan la misma cantidad de niños y niñas saharauis, y si con esfuerzo y empeño podemos superarla, eso sería nuestra mayor ilusión. No obstante, a estas alturas solo contamos con poco más de 13 familias dispuestas al acogimiento de estos niños. Y necesitamos más», añade el dirigente –los interesados pueden llamar al 636412319 o al 628545330–.

El presidente de la Asociación Riojana de Amigos del Sáhara, José Tomás, que viene a confirmar tal necesidad, precisa que este año «vamos a contrarreloj», y enmarca tal llamamiento «dentro del inicio de una campaña» –que suele estirarse hasta finales de abril– «habida cuenta de que el porcentaje de familias que repiten es menor que otros años».

Tomás, que lleva un lustro haciendo precisamente ese mismo llamamiento para la acogida dadas las dificultades que parecen irse agravando con el tiempo, cree que el grado de fidelidad que la sociedad mostraba con 'Vacaciones en Paz' no es la misma que antaño, aunque entiende que la principal causa del problema no es la caída del interés en el programa, sino la propia disponibilidad de las familias.

«Este año tenemos previsto traer a 40 niños, al menos los mismos que el último año sabiendo que lejos quedan los buenos tiempos... No todos ellos precisan una familia, ya que un grupo, con necesidades especiales, irá a un centro, pero cuantas más se muestren interesadas para la acogida, mejor», reconoce quien considera que el factor económico no es determinante pues en la comunidad, y en virtud a los convenios tanto con el Gobierno de La Rioja como con el Ayuntamiento de Logroño, «el grueso de los gastos generales está cubierto».

«Se trata de acoger en tu domicilio a un niño o niña como unos más de la familia», resume José Tomás, a los que Mohamed Labat Mustafa añade que, en ese sentido, el reto es que los niños que pudieron venir el año pasado puedan volver a hacerlo. «Si alguien ha podido venir antes de los 12 años lo deseable sería que pudiese seguir haciéndolo hasta esa edad».

Y ahí, Tomás, predica con el ejemplo. «He acogido a varios pequeños, y a día de hoy acojo al hijo de una niña que en su día estuvo en mi casa... a un nieto, por decirlo de alguna manera», cuenta.

«No nos cabe duda de que hay muchas familias que podrían acoger dada la generosidad de La Rioja, pero seguramente desconocen 'Vacaciones en paz'», dicen desde la delegación saharaui de un programa humanitario y solidario, a la par que reivindicativo: «Estos niños son sus mejores embajadores y, a través de ellos, se da a conocer la situación de un pueblo exiliado, refugiado y que espera que se cumpla la legalidad internacional desde hace más de cincuenta años».