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«Ni existió tal charla ni la grabación que corre por ahí tiene nada que ver con el colegio, y eso es precisamente sobre lo que han construido toda esta historia... Mentira sobre mentira. Han ido contra nuestro CEIP, pero podrían haberlo hecho contra otro ... cualquiera». Luisa Bárcenas aún no da crédito a lo sucedido en las dos últimas semanas. La directora del Escultor Vicente Ochoa de Logroño no ha parado de recibir muestras de apoyo desde que se convirtió en 'objetivo' de colectivos ultraconservadores tras una supuesta querella por «obligar a alumnos, tanto de Infantil como de Primaria, a asistir a charlas de carácter sexual».
Una denuncia que, de entrada y para alivio del colegio de El Cubo, fue rechazada frontalmente por la comunidad educativa pública al entender que las acusaciones eran «absurdas, producto de la ignorancia y la desinformación o de una manipulación malintencionada». Y es que se da la circunstancia de que la querella de Abogados Cristianos, a instancias de 'Los Niños son Intocables' –con Salvador Martí, impulsor del polémico proyecto Alexia, al frente–, no recogía ni una palabra del hecho al que se le dio publicidad. La misma, a la que accedió Diario LA RIOJA después de que el comunicado de prensa se hiciese público y, dado su contenido, estallase la controversia, no denunciaba «charla sexual» alguna, solo la negativa de la dirección del colegio a recoger un 'pin parental' propuesto por organizaciones como Vox y Hazte Oír que ni es oficial ni tienen por qué recoger sin instrucción al respecto por parte de Educación.
Los mensajes de solidaridad con el centro educativo logroñés no han parado desde entonces e incluso el Gobierno de La Rioja salía en defensa del colegio y de su directora ante unos «hechos radicalmente falsos». Basta con leer la querella para comprobar que en la misma no se hace referencia concreta alguna a la celebración de tales charlas más allá de un generalista «conocimiento de charlas de alto contenido sexual e ideológico que se están empezando a impartir en los centros de La Rioja». Y hasta ahí.
Así, el documento registrado en los juzgados de la capital riojana apuntaba directamente contra la directora por negarse «no solo a pedir consentimiento a los padres para las charlas sobre temas socialmente controvertidos –entendiendo como un 'derecho inalienable' el que se solicite permiso previo para impartir dichas charlas de contenido ideológico–, sino incluso a recoger y sellar la solicitud». Y ello lo denuncia alguien que no es padre de alumno del centro... al que el Ayuntamiento le retiró en su día el apoyo brindado en un principio por difundir mensajes homófobos en las redes sociales.
El colegio en cuestión, en cualquier caso, nunca ha estado solo. Empezando por su fiel AMPA, siempre al lado. Primero reaccionó la propia Consejería de Educación y luego FAPA-Rioja. A ellos les siguieron sindicatos y otros colegios, de Logroño, de La Rioja, e incluso de otros lugares. «Me han dado ánimos hasta de Vinaroz (Castellón)», explica Luisa. El claustro de profesores lo tuvo claro desde el principio. Y el Consejo Escolar. Y todo por la, a su juicio, «información falsa y completamente tergiversada».
El círculo solidario se cerrará esta misma semana con una concentración que culmine la acción aprobada para estos días por la propia comunidad educativa del Vicente Ochoa: una iniciativa que lleva por nombre 'Entrelazados con el colegio' y que pretende llenar de lazos la verja principal del recinto en defensa de una sociedad y una escuela plural, diversa y libre. Sin manipulación ni malas intenciones. «Hoy nos ha tocado a nosotros, pero, ¿y mañana? Esto va más allá del cole y es momento de unirnos», concluye Bárcenas.
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