ADIF reparará la rejilla que mantiene un carril cortado desde hace casi siete meses

Así, según el mismo Consistorio capitalino y tal y como ha confirmado el propio Administrador de Infraestructuras Ferroviarias, será Inoxmar Entreacerox, sociedad especializada en la fabricación y montaje de estructuras metálicas, quien se encargará de unos trabajos contratados por 22.982 euros. Se da la circunstancia de que la rejilla de ventilación o respiradero había cedido a finales de 2023 y ya se informó a principios de 2024 que hasta que no se hiciese la correspondiente reparación, ese tramo de calzada permanecería cortado «por razones de seguridad».

La conexión de las calles Eliseo Pinedo y Pedregales, abierta en 2012 en lo que es el último tramo del soterramiento (y por tanto del parque Felipe VI) en sentido este, ha mantenido inutilizado prácticamente uno de sus tres carriles durante más de medio año. Dos hileras de 'new jersey' de plástico, las habituales barreras blancas y rojas de separación en zonas de obras, han venido canalizando el tráfico para evitar que éste circule por una rejilla de una decena de metros de larga (y de la anchura de un carril) entre los barrios de Lobete y de Cascajos.

Tal rejilla pertenece a la playa de vías subterránea de la estación de ferrocarril, y los problemas surgidos con la misma llevaron al Ayuntamiento logroñés a reducir la calzada a fin de evitar el paso del tráfico rodado sobre la misma a la espera de que ADIF, «de quien depende la misma», actuase poniendo una solución. Ya entonces ADIF, a requerimiento de este periódico a finales del pasado y citado enero, precisó que había encargado un informe que analizaría «la forma óptima» de abordar la reparación.

La misma, no obstante, llegará ahora, y lo hará «lo antes posible», según la entidad pública empresarial, aunque, al respecto, el concejal delegado, Ángel Andrés, concreta que las previsiones apuntan a que la sustitución de la rejilla como tal se llevará a cabo en la semana del 6 de mayo. Para ello, no obstante, los trabajos en el subsuelo, es decir, desde el interior de la propia infraestructura ferroviaria, se ejecutarán los días previos para tenerlo todo preparado –dando cumplimiento al contrato preparado para tal fin–.

Será solo entonces cuando el tráfico recuperará su habitual circulación. En este sentido, desde la asociación vecinal de Lobete se vuelve a recodar que Eliseo Pinedo soporta un notable tráfico rodado precisamente porque el vial paralelo, entre Lope Toledo y Juan Boscán, no permite el sentido de circulación norte-sur (apostando desde hace años por su apertura para el mejor fluir en la zona). La asociación vecinal, de hecho, no se olvida de una reclamación que va camino de convertirse en una de esas viejas aspiraciones de barrio.