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Un párrafo. Solo uno. Pero clave. «Interviene, brevemente, la secretaria de esta mesa de trabajo para apuntar el procedimiento administrativo de la revisión del PGM ... y su situación con respecto a los criterios y objetivos. Señala que dada la fase en la que está el expediente en contratación, con una propuesta de resolución por parte de la dirección del contrato, resulta innecesario la definición de nuevos criterios y objetivos. El establecimiento de dichos criterios debe hacerse al inicio de un contrato y este punto se superó en enero de 2022».
Así consta en el acta elaborada por la citada secretaria de la mesa de trabajo para el seguimiento de la revisión del Plan General Municipal de Logroño, la entonces directora general de Urbanismo Estratégico, Pilar Sampedro, de una reunión celebrada el pasado 15 de abril de 2024, que fue firmada electrónicamente el 20 de mayo con los citados reparos técnicos de la propia Sampedro incluidos en el texto.
El problema es que lo entregado a los grupos municipales, ya el 23 de julio y tras las reiteradas solicitudes por parte de la oposición, fue un borrador que, precisamente, omite el párrafo con tales reparos. Se da la circunstancia de que la misma, pese a reflejar que es obra de la citada secretaria, es decir, de la exdirectora general, no incluye firma alguna.
Diario LA RIOJA, que ha tenido acceso a ambos escritos, ha podido comprobar la falta de un párrafo que no es baladí y que, oficialmente, desde el gobierno local se explica que se trata de un borrador de acta anterior, «lo que en ese momento –en alusión al citado 23 de julio– se tenía enUrbanismo», unidad de la que por cierto ya había sido cesada Sampedro con destino a otra dirección general.
Así lo justifica el concejal delegado del Plan General Municipal, Javier Martínez Mancho, quien precisa que «un borrador no es un acta definitiva», que en este caso es anterior a la luego firmada por la misma persona que redacta ese borrador, en su condición de secretaria de la mesa, «y que la fecha de la firma electrónica no tiene por qué coincidir con su incorporación al expediente». Martínez Mancho, por tanto, lo considera una cuestión «menor» pues, además, el acta aún está pendiente de aprobación y es, por tanto, susceptible de modificación y cuantas matizaciones se entiendan necesarias (de hecho, en el borrador, por ejemplo, hay un error en el año de la fecha). Sin olvidar, además, que cuando se remitieron, ya en julio, en el área de Urbanismo estaban con los citados cambios de personal.
El borrador, junto al de otra reunión celebrada el 24 de abril de 2024, fue remitido a los grupos municipales solo 24 horas después de la tercera reunión de la retomada mesa de trabajo para el seguimiento de la revisión del PGM, compuesta oficialmente durante el pasado mandato. El del 24, firmado el mismo 20 de mayo electrónicamente, también difiere del borrador enviado a la oposición, si bien en este caso se trata de intervenciones de políticos, y no de técnicos.
El caso es que son reuniones convocadas precisamente para la actualización de criterios y objetivos para la revisión del PGM (encargados al grupo de trabajo creado en el Consejo Social, con la presencia del COAR y la CPAR, amparándose en «diversos cambios legislativos», y aprobados el 30 de julio), algo no compartido ni por la oposición ni por algunos técnicos de la casa al considerar que los anteriores, de diciembre de 2021 y por unanimidad, eran válidos –tras la adjudicación del contrato de asistencia técnica–.
Sea como fuere, tras el cambio de gobierno y casi un año después, sobre la mesa seguía un informe técnico proponiendo la rescisión del contratista por incumplimiento tras las «grandes carencias y errores contenidos» en el trabajo entregado, y eso que era solo su primera parte. Y es que a cada entrega prácticamente le seguía un informe de reparos por parte municipal, con Pilar Sampedro al frente. Ello se saldaba con un expediente para la imposición de penalidades a la empresa «por ejecución defectuosa» por importe de 3.100,16 euros, del que nunca más se ha sabido.
De estar en tela de juicio a seguir con el contrato y, además, hacerlo reajustando los hitos temporales y presupuestarios. Ezquiaga Arquitectura, Sociedad y Territorio, adjudicataria de la revisión del PGM en 2021, ha pasado de tener una propuesta de resolución del contrato por incumplimiento con Hermoso de Mendoza como alcalde a continuar con los trabajos tras una actualización de criterios y objetivos aprobados por el PP en solitario ya con Conrado Escobar como primer edil. Las reuniones de la mesa de trabajo, retomadas en 2024 para su seguimiento, abren una nueva polémica por la ausencia de tal 'clave' en el texto entregado a los grupos, los reparos técnicos a dicho contrato.
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