«Queremos dar un paso adelante apostando por el futuro», afirma Ferrer

Han pasado más de cinco años desde que Ferrer Sport Center abrió sus puertas en Pradoviejo tras una inversión de 5,5 millones de euros. El edificio, levantado sobre una parcela de propiedad municipal e inaugurado en octubre del 2011 en la zona de Las Tejeras, tiene una superficie total de 4.000 metros cuadrados, 2.200 de ellos destinados a superficie comercial. Un complejo que, en aquel entonces, respondía -en palabras de sus promotores- a la necesidad «de crear un espacio global comercial y de ocio relacionado con el deporte en nuestra comunidad, que aporte a la sociedad riojana un espacio único y diferente, donde no sólo poder adquirir ropa y material deportivo, sino también realizar múltiples actividades de ocio relacionadas con el deporte». De hecho, no sólo era una tienda, sino que se incluían otros muchos servicios.

Hoy, cinco años después, Deportes Ferrer vuelve a transformar su modelo de negocio. «Queremos dar un paso adelante apostando por el futuro; de hecho, se trata de un proyecto que lleva varios años en el cajón y que es momento de acometerlo para potenciar y generar un entorno tecnológico propicio para la venta online», explica Diego Ferrer como portavoz del traslado.

Una «redimensión» de la superficie comercial de 2.200 a entre 800 y mil metros cuadrados en una ubicación más céntrica que la actual y que podría estar lista para mayo o junio. Al menos esas son sus intenciones. «Va a sorprender», asegura quien adelanta que desde este mismo fin de semana -hoy o mañana- comenzará un período de liquidación -campaña de precios agresivos como nunca antes, chollos y rebajas extraordinarias, según adelanta- que se prolongará hasta que haga efectivo el traspaso de cara a la próxima primavera.

Desde Ferrer se insiste en la alianza con Intersport -con la intención de sumar un nuevo establecimiento al ya existente en Las Palmeras (Gonzalo de Berceo)- y en la venta online, «donde sólo la parte tecnológica nos supondrá una inversión que rondará entre los 600.000 y los 700.000 euros». Evoluciona el modelo de negocio pero, por lo demás, todo el personal se mantendrá y se trasladará a la nueva tienda llegado el momento. La sede del Grupo Sapje, que actualmente también se ubica en el citado edificio de Pradoviejo, también será reubicada en otras oficinas con las que cuenta la firma en Logroño.