LA RIOJA
Jueves, 20 de octubre 2016, 00:36
La investigación del accidente de Adradas, en el que falleció una joven logroñesa y una veintena de personas resultaron heridas, apunta a un descuido del conductor del autobús de Alsa, que cubría la línea regular Logroño-Madrid, como posible causa del accidente.
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El siniestro está ... siendo investigado por un juzgado de la localidad soriana de Almazán y, según informa la Cadena Ser de Soria, el chófer del autocar podía estar comprobando los billetes de los pasajeros que se habían subido al autobús en la parada de Almazán a la vez que conducía. El camión, que tal y como quedó acreditado con el testimonio de su conductor y con la comprobación del tacómetro circulaba a 18 kilómetros por hora por una avería, fue golpeado en su parte trasera por el autobús.
Según la información de la Cadena Ser, el billete de uno de los viajeros cayó al suelo cuando el propio conductor del autocar se agachó para recogerlo y, al incorporarse, no habría tenido tiempo para esquivar al camión. En caso de acreditarse dicha tesis, el conductor del autobús, vecino de Logroño, podría enfrentarse a un posible delito de homicidio imprudente y varios de lesiones, penado con un máximo de hasta cuatro años de prisión e inhabilitación profesional.
Otra de las cuestiones que no se hicieron públicas en los primeros días del suceso es si el camión averiado llevaba las luces de emergencia puestas, toda vez que su conductor declaró ante la Guardia Civil que, tras notar la pérdida de potencia, estaba buscando un lugar para parar el vehículo. En este sentido, según la Cadena Ser, el camión sí que llevaba encendidas las luces intermitentes en el momento de la colisión.
El accidente
El siniestro se produjo a las 17.15 horas del pasado día 19 de septiembre en el punto kilométrico 24 de la autovía A-15, a la altura de la localidad de Adradas, entre Almazán y Medinaceli, en la provincia de Soria.
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En el momento del accidente viajaban 45 pasajeros además del chófer y la colisión fue por alcance del autocar, en la parte frontal derecha, contra la trasera izquierda del camión en una línea recta con plena visibilidad.
El conductor del autocar tiene 52 años y es chófer desde los 25, por lo que cuenta con una acreditada experiencia. Trabajaba para Alsa desde el año 2008.
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