Gamarra destaca la innovación de Standard Profil

La planta atraviesa un buen momento como pudo comprobar ayer la alcaldesa, Cuca Gamarra, durante la visita que realizó a las instalaciones situadas en la entrada a Varea y de las que «cada día salen piezas para 10.000 coches vendidos por todo el mundo». Un volumen de fabricación, que como reconoció a sus responsables, «convierten a esta empresa en un referente para Logroño por su gran proyección exterior y su apuesta por la innovación».

La firma, especializada en la fabricación de sistemas de estanqueidad para automóviles, («llenamos con perfiles y juntas los huecos entre los cristales y la puerta del coche», traducido por Werner Gehring), está considerada por su volumen de ventas como la segunda mayor multinacional del sector en Europa.

En total, produce en 12 países del mundo, con una plantilla de 7.000 empleados, de los cuales 1.050 se reparten entre las tres factorías riojanas: dos en la Portalada y otra en el polígono de Cantabria, además de una cuarta planta en Mendavia.

Gamarra conoció de primera mano los procesos y sus planes de futuro.

La alcaldesa valoró la «importante apuesta que Standard Profil (Permolca en sus orígenes) mantiene por la innovación y la investigación y «que supone una fuente de riqueza para la ciudad». En este sentido, recordó que es una de las firmas del Patronato de la Fundación Riojana para la Innovación. Werner Gehring corroboró que si en estos tiempos la empresa continúa en la senda del éxito es por la «fuerte apuesta por la competitividad» y por la I+D+i.

«Es la clave de este negocio. Tres años antes de salir un coche, ya estamos de lleno investigando nuevos materiales, nuevos procesos. Es la única forma de ser competitivos, tener nuestra propia tecnología», explicó el directivo alemán en el encuentro que mantuvo con la alcaldesa y en el que se mostró muy optimista con el futuro del sector de la automoción, aunque planteó algunas carencias: «En La Rioja como en el resto del país hay ingenieros muy preparados, pero siguen faltando mecánicos. En Alemania todos los jóvenes quieren ser mecánicos, porque es un trabajo cualificado y remunerado. Las empresas forman su cantera, lo que no ocurre aquí».