Los pilares de Nano Mesa

Alexander Mesa (5/2/1995, San Cristóbal de La Laguna) habló ayer del momento que vive la UD Logroñés. No lo hacía desde su llegada, unos días antes de que el equipo viajara a Sabadell. Se presentó con 16 minutos de juego y un balón a la madera. Suma ya once encuentros con los riojanos y un gol, emparejamiento de cifras que puede ser llamativo por la segunda pero, más allá del número de tantos, Mesa se ha convertido en uno de los líderes de la revolución que vive la UD Logroñés. Su pensamiento se resume en tres palabras: trabajo, sacrificio e ilusión.

«Estoy contento por las circunstancias que está viviendo el equipo y por esas dos grandísimas victorias que nos han sacado de la zona de descenso», explicaba ayer en rueda de prensa antes de desvelar que confía que los balones que no están entrando en este momento «entren lo antes posible».

E

l futbolista tinerfeño recuerda que el día de su presentación como jugador de la UD Logroñés dejó claras sus intenciones. Aquellas palabras se pueden ver reflejadas ahora sobre el césped. «Dije que no llegaba a Logroño a verlas venir, sino a dejar todo por que el equipo siguiera en Segunda la próxima temporada, que creo es que lo que se merece. Vengo de Primera y de un ascenso con el Cádiz, pero no vengo a ver qué pasa, sino a sacrificarme. Yo soy así. Lucho, trabajo y cada día intento ganarme en el campo el respeto de todos», reitera, antes de describir lo que vio a su llegada y cuál fue el momento en el que cambió todo. «Cuando yo llegué, no vi al equipo mal o decaído. El fútbol son rachas. Unas veces son buenas y otras malas, pero yo no vi falta de motivación o coraje, simplemente son rachas que vienen y van. La UD Logroñés pasaba por una mala racha de resultados, pero no jugaba mal. Antes de viajar a Ponferrada, el equipo se sentó y habló. Lo que allí se dijo es que había que sacar adelante la situación, estar unidos y correr. Correr, correr y correr. No dar un balón por perdido. Yo creo que ha sido la clave para ganar ahora partidos y estar en una racha positiva».

Analizando los números, Mesa ha aportado algo más que su presencia. Ha dinamizado el ataque, ha dado opciones a sus compañeros, aunque él evita colgarse esa medalla. Asegura que él no «influye» en que sus compañeros sean «mejores» y simplemente se ciñe a recordar que la UD Logroñés cuenta con «futbolistas «de mucha calidad». «Paulino lo demuestra; Olaetxea, también; Iñaki ya era un espectáculo corriendo la banda... Vine para ayudar y yo lo entiendo como trabajar. Voy a una con los compañeros y ellos conmigo». añade.

Pero el cambio no solo se apoya en los jugadores. Mesa recuerda al técnico, Sergio Rodríguez, y de sus palabras se desprende, entre otros sentimientos, el de agradecimiento. «El míster está implicado y ha sido siempre el primero en salir y animarnos cuando la racha era mala. Se han escuchado muchas cosas fuera, pero siempre hemos estado a muerte con él. Cuando llegué me pidió implicación y trabajo. Yo necesitaba confianza después de un tiempo sin jugar y él me la ha dado», explica.