Iñaki, nuestro Pau Gasol

Iñaki no es el mejor futbolista riojano de todos los tiempos, pero ha quedado demostrado que es el más trascendental de la UD Logroñés en la temporada más importante de su historia.

La diferencia entre el Barça y la UD Logroñés es que los catalanes no necesitan a Pau Gasol en estos momentos. Jasikevicius y una plantilla de las más caras y potentes de Europa han colocado a la sección de baloncesto de la entidad en la mejor situación de los últimos años. El retorno del hijo pródigo no sería más que la guinda del pastel a un equipo que viene de ganar recientemente la Copa del Rey superando en la final con claridad a su eterno rival, el Ral Madrid.

En cambio, los blanquirrojos esperan como agua de mayo que su capitán vuelva a correr por su banda izquierda, a colocar esos centros mágicos que han sido medio gol en muchas ocasiones esta temporada. A Gasol no se le echa en falta, se le desea pero, en la Ciudad Condal no tienen la urgencia de que se vuelva a poner la elástica con la que se ganó su derecho a participar en la NBA.

Baloncesto y fútbol. 2,16 y 1,77. Se parecen como un huevo a una castaña. En físico, carrera profesional, incluso en el tamaño de sus carteras. Pero Iñaki, ahora mismo, es más que Pau Gasol para la UD Logroñés y sus aficionados. Deportiva y, sobre todo, anímicamente. Los hinchas le invocan y le nombran, como si repetir muchas veces su nombre fuera a hacer que volviera a lucir el brazalete antes de lo esperado. Porque todos piensan que con el calagurritano sobre el césped las cosas van a irle mejor a los blanquirrojos, porque cuando estaba las cosas iban mejor, mucho mejor. Porque tanto oscurantismo en el club sobre la lesión no ha hecho más que aumentar el nerviosismo general.

Menos mal que a Nano Mesa se le escapó en Twitch que en dos semanas pensaba que podía estar. Al menos, cada día que pasa menos queda para su vuelta. Como si fuera el Cid, Iñaki es el adalid que se espera para coger otra gran racha de resultados que lleve a la UD Logroñés a alcanzar la ansiada salvación.

Mientras tanto, mientras llega el '16', sus compañeros se regalaron este domingo una bocanada de aire fresco, no muy intenso, porque la UDL necesita sumar de tres en tres, pero aire al fin y al cabo. Un resuello que, al menos, sirve para que pase otra semana fuera de los puestos del descenso, para que falte otra semana menos para que vuelva Iñaki.