Diez años después, Iñaki repite rival

En esa primera época de juventud, Iñaki pasó cuatro años en Logroño. Después, Racing de Santander, Alavés y Tenerife le llevaron a disfrutar de la Segunda División, a cuyas puertas llama ahora vestido otra vez de blanco y rojo. «Cuando firmé, tenía súper claro que el objetivo era el ascenso y luego, si puede ser, estar muchos años y soñar por cosas. Por suerte, con mucho trabajo, se ha conseguido lo que merecíamos», incide.

Ese 18 de agosto del 2010, todo parecía que iba a resultar fácil. Una UD Logroñés con apenas un año de vida ambicionaba dar un salto rápido, pero ha costado un mundo. «La ilusión era muy grande por parte de todos. El objetivo era claro, pero el fútbol no es matemático. El camino ha costado mucho y eso nos hace valorarlo más, el Logroñés ha enraizado, ha crecido su afición y por fin van a volver equipos grandes a Las Gaunas», sintetiza.

Porque aquel Athletic del 2010, comandado, entre otros, por Fernando Llorente, atrajo al Municipal a 7.500 personas. «Es un equipo muy grande en todo el norte de España y se vivió un gran ambiente», rememora. Aunque lamenta que no se pueda repetir el sábado: «Las circunstancias han cambiado, la situación que vivimos es única y esperemos que se solucione pronto, que la gente pueda volver al estadio porque será síntoma de que se está mejorando». Al fútbol sin público Iñaki no se acostumbra pero asegura que «toca adaptarse».

En una imagen que él guarda de ese amistoso a beneficio de Haití, se le ve derribando a Llorente. Penalti, aunque no fue gol. «Lo recuerdo perfectamente. Creía que llegaba a todo, pero eran jugadores de Primera y de la zona alta. Todos eran súper fuertes y súper rápidos, me parecían enormes», se sincera.

Ya con 32 años y bregado en muchos campos, tal vez hoy cambie esa perspectiva aunque recuerda que «las categorías en el fútbol están por algo». Afortunadamente, la UDL ha dado el salto y se medirá, ya no en amistosos sino en encuentros oficiales, «a muchos clubes grandes, conjuntos históricos y de gran potencial». Eso da más valor al ascenso», recalca.