Un calendario, dos velocidades

«Nos fijamos en la fecha de inicio de la temporada, pero tenemos que darnos cuenta de que el final de mercado no coincide. Contamos con unas semanas posteriores con el mercado abierto», recordó Lasheras. «El tiempo para fichar dura muchísimo y no queremos que, por correr y hacer las cosas justo para los primeros partidos, cometamos errores que luego podamos pagar a la larga. Preferimos ir poco a poco», sentenció. Según Lasheras, la plantilla cuenta con «una base de la temporada pasada, con jugadores que conocen la categoría» y con el beneplácito de Sergio Rodríguez. El técnico entiende la delicada situación del 'bazar' de Segunda y confía en que los refuerzos que se sumen al proyecto, aunque un poco más tarde, sean de garantías.

«La situación esta temporada es especial. En primer lugar, porque jugamos en una categoría nueva y nos enfrentamos a un nuevo mercado. Y todo ello unido a la incertidumbre que existe en el mundo (y también en el fútbol) en aspectos económicos, presupuestarios... Hace que todo el mundo ande con pies de plomo y que los pasos se estén dando poco a poco», puntualizó el director deportivo, que ha visto cómo la UDL se ha convertido en el teórico 'destino' de una docena de futbolistas cada día. El equipo, como recién ascendido, está en todos los rumores (la mayor parte, interesados por parte de intermediarios), pero Lasheras asegura que el trabajo que va a dar fruto no se conoce, pero que llegará pronto, con altas o cesiones, uno de los filones que toda la Segunda División está intentando explotar. «Nuestra idea es traer gente que se adapte a nuestro proyecto, filosofía de juego y mejore la plantilla», aseguró. Sólo calidad, sin fechas, más allá del punto de no retorno del 5 de octubre.