¿Por qué las novias que se casan por segunda vez visten de forma diferente?

En su lugar, son perfectos los vestidos cóctel o de largo 'midi'. Si se sigue un estricto protocolo nupcial, el velo no será necesario, puesto que tradicionalmente se utilizan en señal de respeto al entrar a una iglesia. Además, también se puede prescindir del ramo, ya que originalmente lo llevaban las novias a modo de ofrenda a la Virgen y sería incoherente utilizarlo en bodas que se ofician fuera de un templo religioso. En cambio, se abre un amplio abanico de posibilidades donde las tendencias juegan un papel fundamental: desde vestidos cortos y dos piezas hasta monos o trajes de chaqueta, ¡todo vale! A continuación, te mostramos las claves que hemos visto en las pasarelas 'bridal' de Barcelona y Nueva York para las novias que planean casarse en 2020.

También se conoce como 'escote Meghan', ya que la duquesa de Sussex utilizó un diseño con este corte como segundo look nupcial en su boda con el príncipe Harry. Desde entonces, se alzaron como una de las opciones favoritas para las novias actuales. Sin ir más lejos, María Pombo lo utilizó como primera opción para caminar hacia el altar. Si tu boda es civil, será perfecto en un vestido de largo 'midi', tal y como propone para la nueva temporada la firma nupcial Amsale.

Marta Ortega, la heredera del imperio Inditex, hizo suya esta tendencia al casarse en segundas nupcias con Carlos Torretta. La hija de Amancio Ortega sentó cátedra y escogió un dos piezas en tonos rosas de Valentino. La firma bilbaína Sophie et Voilà, en su afán por moldear a las novias más minimalistas y depuradas de la industria 'bridal', también ha lanzado un conjunto muy especial de falda larga con abertura lateral y un cuerpo 'halter' con movimiento y lazada al cuello que podría ser una opción ideal en este tipo de celebraciones.

Elegantes, regios y con un halo de misterio. Así son los diseños que cada vez más novias maduras eligen para casarse por segunda vez, tal y como hizo recientemente la soprano Ainhoa Arteta. Aunque desde hace varias temporadas son un comodín entre las invitadas, ahora se convierten en una opción indispensable para la industria nupcial. La firma inglesa Jenny Packham lo corrobora con este diseño cuajado de aplicaciones de pedrería que se presentó en la última semana de la moda 'bridal' de Nueva York.

Este tipo de vestidos tienen la peculiaridad de ser cortos por delante y largos por detrás, algo recurrente en la nueva colección de la firma Monique Lhuillier, todo un referente en el mundo nupcial. Son buenas opciones para bodas civiles gracias a este toque de tendencia y perfectos para aquellas mujeres que quieran potenciar sus piernas en el día de su boda sin renunciar al estilo 'princesa'.

Si te casas por lo civil y quieres volver a vestir de largo, es conveniente que prescindas de colas de arrastre, un detalle, en todo caso, adecuado para ceremonias religiosas. En su lugar, puedes poner el foco de atención en detalles románticos como encajes, bordados o detalles de tul como el que ha presentado la firma Temperley London en su colección para la próxima primavera.

Otra opción para las que no quieran llevar ni vestidos ni faldas en su segunda boda son los monos, unas piezas versátiles y elegantes que juegan un papel casi fundamental en las colecciones actuales. Firmas consolidadas como Rosa Clará no han dudado en incorporarlos a sus propuestas veraniegas para darnos las primeras pistas sobre los cortes que se llevarán en 2020: ceñidos por arriba y fluidos y amplios por debajo, confundiéndose casi con la silueta de un vestido largo.

Los trajes de chaqueta ya se han consolidado en el mundo nupcial como una opción tremendamente sofisticada para ceremonias civiles. Ahora, los diseñadores experimentan con las infinitas fórmulas que les ofrece la sastrería. Una de ellas es el vestido-blazer, una chaqueta cruzada y 'oversize' reconvertida en vestido de novia, tal y como propone la innovadora firma Danielle Frankel. En este caso, parece imprescindible jugar con jacquards o encajes para hacerlos aún más especiales.

En la misma línea podemos mostrar una de las propuestas más especiales de Lela Rose. Se trata de un dos piezas compuesto por un sencillo pantalón de pinzas y un chaleco cruzado anudado con una lazada a la cintura. Además, se incorporan pinceladas de color que rompen con el blanco nupcial gracias a unos pequeños bordados-joya.

Y si hablamos de color hay que mencionar las propuestas nupciales de Vera Wang, ideales para novias rompedoras que quieran un look totalmente distinto al de su primera boda. La diseñadora utiliza unos tonos apagados dentro de la gama de los rosas, verdes y azules, recreando un universo nupcial con pinceladas nostálgicas, vestidos vaporosos y flores XL prendidas de los hombros, la cintura o el cabello.

Son un clásico en este tipo de bodas y se pueden adaptar a todos los estilos. Si buscas un look sofisticado, apuesta por un diseño de manga larga que compense el largo de la falda. Si buscas pinceladas de tendencia, busca un vestido estructurado, potencia los hombros o da volumen a las mangas, tal y como recrea de forma magistral Sophie et Voilà en su última colección.

Y si tienes dudas y quieres apostar sobre seguro, nunca estará de más recurrir a un vestido de largo a media pierna, manga larga o francesa y detalles especiales en pequeñas dosis. Hemos encontrado un diseño ideal en la colección de primavera-verano 2020 de Danielle Frank. Bastará con poner énfasis en unos buenos pendientes y un calzado adecuado para estar perfecta.