Negocios que con el calor disparan sus ventas y otros que pierden clientela. Es la cara y la cruz del calor de estos días. En una heladería de la Gran Vía logroñesa aseguran que este año se acercan casi la mitad de clientes que el ... verano pasado, mientras que otros ven 'volar' sus mercancías. Es el caso del 'boom' de los ventiladores. En los lineales de las grandes superficies a última hora del día prácticamente no quedan existencias. La gente quiere quitarse el calor rápido y cada vez son más los que apuestan por este aparato, del que se están vendiendo el triple de unidades que el año pasado. Este es al menos el balance que hacen en MediaMarkt, donde hacen reposiciones a diario: «Las existencias se acaban enseguida..., ha habido veces que se los han llevado hasta sin tornillos, porque se habían perdido, con tal de tener uno... e, incluso, han venido de Pamplona porque allí faltaban», señala una empleada..
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Los instaladores de aire acondicionado también se ven estos días desbordados y con una larga lista de espera. «En los últimos años hemos duplicado nuestro trabajo», resumen en una empresa especializada de la ciudad: este verano llevan realizados 40 montajes en empresas y sobre todo en casas particulares, donde pagar 700 euros por este nuevo electrodoméstico se ve como una buena inversión pues todo apunta a que el calor sofocante ha llegado para quedarse. Pero, además, el calor ha cambiado las prioridades en la cesta de la compra. En 'Mi Alcampo' los productos frescos se han disparado estos días entre un 30% y un 40% respecto a otras fechas del verano menos calurosas. «La venta de helados, gazpachos, yogures líquidos, melones, sandías... se disparan», afirma el encargado del establecimiento de Galdós, donde cada día se consulta la previsión del tiempo antes de realizar los pedidos a la central.
Y, mientras los servicios sanitarios se preparan para esta ola de calor, las farmacias también experimentan mayor afluencia, sobre todo de clientes que acuden con sensación de mareo y dolor de cabeza. «Lo que les aconsejamos es que beban agua y, si persisten los síntomas, que acudan al médico», nos explican tras el mostrador del establecimiento de República Argentina con Galdós, donde una media de diez personas al día acuden allí para tomarse la tensión.
«A unos les sube y otros les baja, y no hay distinción de edad. También vienen muchos jóvenes: calor y estrés laboral es una mala combinación y esto lo vemos últimamente bastante en gente que no es muy mayor». La otra cara de la moneda la encontramos en negocios como las heladerías donde, al igual que las terrazas, estos días deberían estar a rebosar, pero la realidad es que permanecen vacías. «La gente o va a la piscina o se queda en casa. Esto se empieza a animar a última hora, a la hora de cerrar». Son los incondicionales, que nunca fallan. ¿Sabores?: «Los clásicos son el de nata y 'stracciatella', pero estos días el que triunfa es el helado con sabor a frutas».
La Rioja ha sufrido este martes otra jornada de calor sofocante y mínimas que en algunos casos no han bajado de los veinte grados, las denominadas 'noches tropicales', que marcan el umbral para conciliar el sueño.
Por segundo día consecutivo la máxima la han marcado Nájera , en el caso de ayer con 38,7º, un grado más que el día anterior. Le siguieron Logroño y Haro , ambas con 38º.
Las mínimas más elevadas se han dado en Cenicero (22,8º) y Logroño (21º). El resto de cabeceras de comarca se han situado entre los 17 de Alfaro y los 19,8 de Haro .
Las altas temperaturas ya indican que el día ha sido poco nuboso, con intervalos de nubes altas y nubosidad de evolución, y chubascos y alguna tormenta en la Rioja Alta. Las temperaturas fueron en ascenso, más acusado en las mínimas y ligero en las máximas. Vientos del sur y sureste, que giraron al oeste por la tarde y que arreciaron en zonas de tormenta.
El aviso se mantiene de color naranja hasta las 21 horas del jueves 25 , día en el que se espera que se superen los 41º de máxima, sobre todo en las poblaciones de la ribera del Ebro.
Logroño la máxima de 38,0º y la mínima de 21,0º
Nájera la máxima de 38,7º y la mínima de 18,4º
Alfaro la máxima de 37,8º y la mínima de 17,0º
Haro la máxima de 38,0º y la mínima de 19,8º
Anguiano la máxima de 33,7º y la mínima de 16,3º
Cenicero la máxima de 37,1º y la mínima de 22,8º
Enciso la máxima de 34,3º y la mínima de 17,5º
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