«Somos la única comunidad autónoma que no está derivando nada a la privada»

Junto al impacto de la pandemia, con la paralización del sistema y el cierre de quirófanos excepto para las cirugías urgentes oncológicas, Lafuente aclara que la internalización «ha afectado y mucho» a las listas de espera quirúrgicas. «Hay que distinguir dos tipos: la in-in, de dentro a dentro, de Los Manzanos al sistema, como ocurrió con la cirugía cardiaca, que ha sido un modelo; y la out-in, de fuera a dentro, desde otras comunidades dentro del sistema público al nuestro, con nuevos procedimientos quirúrgicos que antes se hacían fuera y ahora hemos asumido», resalta.

«Tenemos que mejorar mucho todavía», admite el gerente del Seris, quien, no obstante, resalta que «somos la única comunidad que no está derivando nada al sistema privado y, pese a eso, estamos en una espera media de 97,5 días, a la cabeza del ranking de mejor situación».

Tampoco olvida los buenos indicadores en primeras consultas de Atención Especializada. «Tú puedes tener dos cuellos de botella, el de consultas y el de quirófano. Muchas comunidades tienen el de consultas, porque las han cerrado para que no lleguen a quirófano, pero nosotros hemos decidido que no haya lista de espera en primeras consultas para que pueda llegar todo a quirófano y se priorice, que lo más grave se pueda hacer lo primero y con rapidez», defiende, para añadir que, a la vez, se han recuperado al cien por cien los cribados: de mama, de colon, de cérvix... «Eso supone más detecciones y que algunos de los diagnósticos precisen de intervenciones quirúrgicas urgentes. De hecho, en el primer trimestre de este año hemos hecho más de cien intervenciones oncológicas respecto a las cifras de los tres primeros meses de 2022. Por ejemplo el tumor de colon requiere de unas seis horas, tiempo en el que se pueden hacer seis o siete hernias», detalla Lafuente.

Y más motivos de orgullo: «Somos la comunidad autónoma con menor tiempo de espera para lo urgente, lo oncológico, 18 días, y eso es una pasada porque en diciembre estaba en 25 y luchamos para reducirlo aún más», asegura.

Entre las claves para lograr esa mejora, insiste en el refuerzo de las plantillas, un eje que no se ha descuidado, recuerda, «con la contratación en los dos últimos años de casi 80 médicos y 150 enfermeras». «Vamos a seguir contratando», asevera, para defender la necesidad de «ser atractivos para el profesional y para ello no cuenta solo lo económico, sino los proyectos y las nuevas técnicas quirúrgicas».

Con el compromiso de mantener abiertos los quirófanos por las tardes y los sábados e incidir en la optimización de los sistemas con tecnología y digitalización, Lafuente, que no olvida alabar y agradecer la implicación de «unos profesionales de quitarse el sombrero», se muestra seguro del éxito futuro: «Iremos mejorando y bajando, aunque de forma progresiva, porque toda innovación precisa de una curva de aprendizaje. Por ejemplo el Da Vinci, con el que estas semana se realizó ya la primera cirugía. Ese es el precio de la innovación, pero a cambio luego irá en beneficio de los pacientes, con técnicas más precisas, pero menos invasivas, con lo que se reducen las estancias y el periodo de recuperación», concluye.