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L. R.
Viernes, 9 de febrero 2024, 22:32
La movilización del campo riojano retornó el viernes a las carreteras riojanas, que registraron cortes y retenciones en varios puntos. Las protestas volvieron a localizarse en vías claves como la N-232 a la altura de Recajo y el polígono de El Sequero, así como en Alfaro, la N-120 entre Santo Domingo y Grañón, los accesos al polígono Lentiscares en Navarrete y Haro. A diferencia del día anterior, en la capital no se registraron grandes problemas.
La capital está sintiendo las protestas agrarias de forma intermitente y es que el viernes Logroño recuperó la normalidad después de la intensa protesta del jueves, en la que cientos de agricultores y unos cuantos de sus tractores se concentraron durante horas frente a la Delegación del Gobierno. Logrado su objetivo de reunirse con Beatriz Arraiz y con el presidente del Gobierno riojano, Gonzalo Capellán, el viernes perseguía otros objetivos fuera de la ciudad. Los tractores se dejaron ver de forma tímida, con recorridos a primera hora por Cascajos y una delegación dirigida al Consejo Regulador, así como paseos a cuentagotas que provocaron atascos momentáneos en algunos accesos a la capital o, por la tarde, en la zona de La Cava.
El agro de la comarca de Calahorra siguió al pie del cañón en la cuarta jornada de movilizaciones. De nuevo, el acceso a la ciudad bimilenaria desde la AP-68, en la carretera LR-134, fue uno de los puntos más conflictivos para circular durante toda la mañana. De hecho, agentes de la Policía Local y Guardia Civil apenas se despegaron de esta zona, donde a primera hora del día se produjeron las retenciones de tráfico más importantes. El tramo de la carretera LR-134, que discurre junto a la vía verde del Cidacos, hasta la rotonda del parque de bomberos, fue también un ir y venir de tractores. En esta misma rotonda agricultores, principalmente de Autol, protagonizaron una de las acciones reivindicativas destacadas de la jornada, al verter en el asfalto unos 2.000 litros de agua tintada, con la que simulaban un vertido de vino. Pero a pesar de los cortes, las ralentizaciones del tráfico y las molestias generadas los agricultores se sienten apoyados y arropados. «Yo creo que la gente lo está entendiendo», aseguraba Roberto Vázquez, entre la veintena de agricultores de Calahorra, El Villar de Arnedo y Pradejón, que a las nueve de la mañana se concentraban en el aparcamiento del Hotel-Restaurante Zénit. A mediodía día y con el 'permiso' de la Policía Local, se permitió a un grupo acceder, como ya han hecho en días anteriores, al casco urbano. A su paso recibieron aplausos, fotos, vídeos... y muchos gestos de ánimo de quienes no les quitaban ojo en la acera.
Los agricultores jarreros volvieron a tomar los accesos a Haro con la misma firmeza del primer día. A las 8 de la mañana la concentración de casi un centenar de vehículos partía de Cuzcurrita hacia la cabecera. Parte de ellos se quedaron en la N-126, entre Haro y Casalarreina, obstaculizando la salida de la autopista. Otro grupo se desplazó a la N-124 provocando kilómetros de retenciones entre Ollauri y las Conchas de Haro hasta el anochecer. Por la tarde eran necesarias dos horas para recorrer el trayecto entre Haro y Briones, que distan entre ellos menos de 6 kilómetros. Pero la retención, aunque ya con tráfico lento, continuó hasta San Asensio por la N-232. Una jornada que recuperó el ritmo anterior al jueves de protestas en Logroño.
En el cuarto día de movilizaciones, la protesta llegó por primera vez a Arnedo, ciudad de cuna industrial, pero en la que residen dos parlamentarios riojanos, el alcalde y portavoz socialista en la cámara regional Javier García, y el popular Toño Eguizábal. «Buscamos llegar a toda la gente que está en el Parlamento de La Rioja, para que nos escuchen, metan presión y se tomen medidas a favor del campo», explicaba Imanol Garrido. Lo hacía después de que decenas de tractores bloquearan desde las 07.00 horas con su marcha lenta las principales calles de la ciudad, las rotondas que regulan el tráfico y los accesos a los polígonos industriales. Y después de emprender una acción también inédita en estos días de protestas y con un notable efecto simbólico, un grupo de agricultores entraba a un supermercado, compraba distintos productos, algunos producidos en países fuera de la Unión Europea, los arrojaban al suelo y los pisoteaban. Patatas, tomates, naranjas, alubias verdes, vino, sandías, piñas... Después, limpiaban los restos. «Tenemos una competencia desleal. Están trayendo productos de fuera de Europa para cuya producción utilizan productos fitosanitarios que a nosotros nos prohíben por ser perjudiciales para la salud», expuso el queleño Alberto Tomás.
Numerosos agricultores de la comarca de Nájera decidieron manifestarse en Navarrete, al igual que hicieron el martes. Tras concentrarse a primera hora en el entorno del municipio najerino, para las 09.45 horas la inmensa mayoría ya se desplazaba hacia el polígono Lentiscares, donde provocaron algunos cortes de tráfico desde el mediodía hasta la hora de comer. Mientras tanto, en Nájera, por la mañana, se quedaron unos diez tractores «de guardia» ralentizando las carreteras comarcales.
Con el ánimo reforzado por el éxito de la jornada del jueves en Logroño, decenas de agricultores alfareños volvieron este viernes a la carretera, a su labor de ralentizar el tramo límite entre el sur de La Rioja y Navarra. Desde primera hora de la mañana, pese a la lluvia, se repartieron en dos columnas de tractores, como ya hicieron el miércoles, una en un sentido y otra en el contrario en el tramo alfareño de la carretera N-232 entre el enlace con la LR-287 hacia Corella y hacia la AP-68 y la conexión con la N-113. Durante toda la jornada mantuvieron un circuito cerrado de marcha lenta que frenó el paso de vehículos. Esta acción, unida al bloqueo en Aldeanueva de Ebro, vació prácticamente de tráfico la N-232 en esta zona. En una acción simbólica, un camión de patatas francesas quedó bloqueado en su marcha lenta.
Los agricultores cortaron durante diez minutos el tráfico en la N-232 en Agoncillo. Los tractores que durante casi todo el día circularon en cadena entre Recajo y Arrúbal pararon a las 13.00 horas a protestar cortando la carretera, avisando previamente a la Guardia Civil. Los tractores volvieron a salir de madrugada para entorpecer la circulación por la N-232 entre Arrúbal y Recajo, aunque pararon a primera hora de la mañana hasta que se despejó la vía debido al mortal accidente de tráfico en El Redal, ajeno a la protesta agrícola. Pasado un tiempo, los vehículos regresaron a la carretera, eso sí, en menor número que los primeros días. Ángel Sagasti, agricultor de El Redal, montaba de nuevo en su tractor porque «hay que luchar un poco más, esto ya es demasiado, las condiciones son una vergüenza». Por otra parte, en Villamediana no hubo presencia de tractores por segunda jornada consecutiva, los agricultores de esa zona se dirigieron primero al Consejo Regulador y después al Palacio de Justicia.
En la comarca de Santo Domingo de la Calzada los tractoristas continuaron sin bajar la guardia, si bien hubo un cambio de estrategia: por la mañana volvieron a circular lento por la N-120, entre la ciudad calceatense y Grañón, como vienen haciendo desde el martes, pero en torno a las cinco de la tarde, a la vista del menor tráfico esperado y tras decidirlo en una asamblea celebrada en Grañón, trasladaron la protesta encubierta a la LR-111, entre la rotonda de la ermita de la Mesa del Santo de la ciudad calceatense y Castañares de Rioja, donde estuvieron circulando en bucle hasta las seis de la tarde. Esta es la principal vía de entrada de turistas, sobre todo vascos, a la zona de Santo Domingo-Ezcaray, aunque no se esperan muchos este fin de semana, por el mal tiempo.
En la comarca de Cervera los agricultores concentraron sus protestas en la carretera en el tramo riojano de la N-113. Quedaron a las 09.00 horas y realizaron una marcha lenta hasta el cruce de Fitero con sus tractores y también con otros que llegaron de la comarca de Tarazona, Ágreda, Ólvega, Castilruiz y Valverde de Ágreda, así como de localidades navarras ya que Valverde está en los límites de cuatro comunidades (La Rioja, Navarra, Aragón y Castilla y León). El resto del día concentraron los tractores en los aparcamientos del restaurante Mojón de Los Tres Reyes de Valverde y salieron a la N-113 allí mismo protagonizando cortes de tráfico puntuales cada media hora, regulados por la Guardia Civil, hasta las 18.30 horas. Allí acudieron agricultores de Cabretón, Cornago, Cervera, Valdeperillo, Grávalos, Igea, Aguilar del Río Alhama y Rincón de Olivedo. Incluso fueron los niños del colegio arropando a sus padres en algún momento.
Información de Isabel Álvarez, Ernesto Pascual, Eduardo García, Diego Marín, Javier Albo, María Caro y Sanda Sainz.
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Clara Alba y José A. González
Alberto Gil | Logroño
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