Torrente de donaciones en La Rioja

Una señora pasa por caja del supermercado BM de avenida de Madrid, en Logroño, y pide que, a su tique, añadan 100 euros de donativo para el Banco de Alimentos de La Rioja. Después, se escabulle buscando el anonimato. Un bonito gesto enmarcado en la X Gran Recogida que se celebra hasta mañana en 85 establecimientos de la región con el objetivo de poder superar los 310.408 kilos de alimentos recogidos en 2020, gracias a los 381.803 euros donados. Los donativos se pueden hacer tanto en efectivo en cajas como en productos a los voluntarios.

José Manuel Pascual Salcedo, presidente del Banco de Alimentos de La Rioja, reconoció ayer que la coyuntura económica actual puede afectar a la campaña pero recordó el lema 'Comer no puede ser un lujo'. «El encarecimiento de la cesta de la compra nos está perjudicando a todos y hasta puedes llegar a pensar que, para algunos, comer puede ser un lujo, y esto no puede ser así», declaró.

Para animar las donaciones este año la madrina es la ciclista logroñesa Sheyla Gutiérrez, quien, además, colaboró ayer como voluntaria en dos supermercados de Logroño, como el Carrefour del Berceo. «Si cada uno aportamos un poco, sobre todo estos días, la ayuda vale para mucho. Y se ve que desde primera hora la gente tiene ganas de colaborar», expuso Sheyla Gutiérrez. Junto a ella ejercían de voluntarias las concejalas de Lardero Marta Gómez y Eva Guerreros, primera experiencia para una y sexta para otra. «Yo empecé para animar a mi hija y porque ella, al ser menor, no podía venir sola», rememoró Guerreros. «Me ha enganchado desde el primer bote de garbanzos que han donado. Estoy entusiasmada. Una señora ha venido con un carro tremendo y ha sido emocionante», confesó Gómez.

Francisco Javier, cliente del supermercado, donó dos paquetes de pasta. «Colaboro por solidaridad, hay mucha necesidad», explicó. Otro hombre, Pablo, aportó legumbres y pasta. «Con un poco que aportemos cada uno se podrían solucionar muchos problemas. No nos cuesta y así podríamos recibir nosotros si un día lo necesitamos», declaró. Después, Isabel también donó legumbres. «Lo hago para ayudar un poco a la gente necesitada estos días, ya lo he hecho otras veces», explicó. Ana, por otra parte, entregó una bolsa con pasta, arroz, tomate, zumos... «Es necesario. Para nosotros, en casa, ya es complicado y trabajamos todos... Alguien tiene que hacer algo ya de una vez», reclamó emocionada.

En el BM de avenida de Madrid ejercían de voluntarios Hellen Méndez y José María Leza, miembros de la ONG Alma Venezuela. «Todos los años apoyamos al Banco de Alimentos de La Rioja porque le estamos profundamente agradecidos por todo lo que colaboran con nosotros», confesó Hellen. «La gente es muy solidaria y consciente del momento que se está pasando», opinó Leza.

José María, cliente del supermercado, donó leche y legumbres. «Se ve necesario hacer esto», apuntó. Y María Ángeles aportó 20 euros. «Yo siempre donaba alimentos pero ahora prefiero así para que ellos elijan lo que más se necesite», expuso.

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