Tambores y cornetas avanzan la Semana Santa en El Espolón

El evento, que este año ha cumplido su undécima edición pese a que debía haber sido la decimotercera -pandemia manda-, sirvió además para conmemorar el medio siglo, que ya son 50+2, de la Banda de La Flagelación. Así, la anfitriona llevó a La Concha dos formaciones, su banda y una agrupación integrada por cofrades que un día formaron parte de la misma, los 'vintage'.

Pero la cita, que logró reunir a un numeroso grupo de público, contó además con la participación de la Banda de Cornetas y Tambores de la Santísima Trinidad de Palencia, con la Agrupación Musical de Nuestro Padre Jesús el Pobre de Madrid y con la Banda de Timbales de los Aspirantes de la Real y Venerable Purísima Sangre de Nuestro Señor Jesucristo de Tarragona. Fue esta última la que, a base de percusión, abrió las actuaciones a poco más de las seis de la tarde.

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Y si los cofrades logroñeses y los llegados de los distintos puntos del país fueron, desde La Redonda, haciendo sonar sus instrumentos por las calles del centro histórico y reverdeciendo en la memoria de sus espectadores unos acordes que no habían podido escuchar desde 2019, cuando finalizaron sus intervenciones en El Espolón realizaron la operación inversa, también llevando su música por la avenida de La Rioja, Bretón de los Herreros, Capitán Gallarza y Portales.

La capital riojana tuvo así un avance de la Semana Santa, aunque aún no hubo más túnicas que las tarraconenses, solo uniformes. Todo apunta a que esta vez la cita logroñesa, declarada Fiesta de Interés Turístico Nacional en 2015, volverá a celebrarse en toda su extensión dentro de unas semanas tras la suspensión de la de 2020 y las estrictas restricciones con las que se organizaron unas pocas citas en 2021.