Sobradamente concienciados

«Yo siempre había querido estudiar fuera, conocer otras culturas y otras maneras de pensar, así que quería optar a esta beca porque reúne todo eso, con el objetivo de intentar hacer del mundo un lugar mejor», explica Olivia. «Yo también me había planteado estudiar fuera y me gustó mucho la idea de empezar de cero con gente alucinante como parece ser la de allá. Solo puede salir algo bueno con la idea de contribuir a hacer un mundo nuevo», declara Ángel.

Para estos adolescentes los problemas de la sociedad actual son el egoísmo, la poca concienciación por el medio ambiente y el desinterés por todo lo que no nos afecte personalmente. Poder recibir herramientas para convertirse en un agente del cambio es algo que a los dos logroñeses les atrajo poderosamente.

«A mí me hace mucha ilusión esta beca porque ya lo intenté hace dos años y me quedé en la fase final. Y que seamos dos de Logroño da mucho orgullo y más ganas de poder traer ese cambio a la ciudad», asegura Olivia. «La beca confirma que estoy preparado para poder cambiar las cosas. Y que haya habido tantas solicitudes me alegra porque significa que cada vez hay más gente dispuesta a cambiar las cosas. Seguro que hay más pero no se atreven», confiesa Ángel.

La labor para estos estudiantes ya ha comenzado. Ángel es el representante de los Centros Educativos hacia la Sostenibilidad y Olivia es miembro de la sección juvenil de la Asociación de Amigos de Luezas y de Amnistía Internacional. Ambos reconocen que fue difícil la elección del centro. «Cada colegio tiene sus peculiaridades y todos son buenísimos», admite Ángel.