Sífilis y micoplasmas genitales, las ETS más diagnosticadas en el San Pedro

Ha señalado que, además de los micoplasmas, herpes y sífilis -de las que cinco eran latentes de duración indeterminada y dos secundarias- en 2017 se diagnosticaron seis condilomas acuminados, una infección por VIH, dos gonococias, tres infecciones por chlamydia trachomatis, cuatro uretritis inespecíficas y una úlcera inespecífica.

Esta leve disminución respecto a 2016 se debe a que han acudido menos pacientes a esta consulta y se atiende a más personas en regladas externas de Enfermedades Infecciosas, que acuden con citas remitidos desde Urgencias y Atención Primaria, ha especificado.

La consulta de ETS del Hospital San Pedro, ha proseguido, tiene como objetivo «el diagnóstico y tratamiento rápido de este tipo de infecciones transmisibles», ya que «es la única forma de romper la cadena epidemiológica». En este área se presta atención sin cita previa a todo el que la solicita, con independencia del tipo de prestación que cubra la asistencia.

Este servicio, que mantiene en parte el anonimato de sus usuarios, criba las infecciones de transmisión sexual en quienes acuden de forma voluntaria y aluden a prácticas de riesgo o presentan alguna sintomatología, y en ella también se da consejo e información para a la prevención, ha subrayado.

Oteo ha concretado que, en 2017, el 74% de los pacientes fueron hombres, y un 26% mujeres, con una edad media global de 34 años, el 76% era heterosexual y el 14% homosexual, y, respecto a la nacionalidad, la mayoría, un 74,23%, eran españoles. Los pacientes atendidos en este servicio cuyo país de origen no era España procedían de Latinoamérica, un 14,43 %; Norte de África, un 4,12%; Europa occidental, un 2,06%; Europa oriental, un 1,03%; y África subsahariana, un 1,03%, ha apuntado.

En lo que va de 2018, ha detallado, se han realizado unas 84 consultas y, en el primer trimestre del año, se han diagnosticado un total de cuatro herpes genitales, tres condilomas, una sífilis, una infección por chlamydia, una por gonococo, y otra por micoplasmas.

Ha destacado que los servicios más demandados son, en primer lugar, la prueba de detección de anticuerpos frente al VIH, un 36% de los casos por contactos de riesgo; y, en segundo lugar, un 30% acude por síntomas.

«En este tipo de infecciones, está demostrado que lo ideal es un diagnóstico y tratamiento precoz, es la única forma de cortar la transmisión, lo que hace que haya que poner todos los medios razonables para que el paciente pueda ser atendido con las menores barreras posibles», ha resaltado. También ha explicado que es probable que este servicio, que solo funciona los martes, no sea conocido de forma suficiente por la sociedad riojana y «podría utilizarse más, aunque lo ideal es trabajar en la prevención mediante información, y, en todo caso, hay que recordar a los ciudadanos que existe».