Seis de cada diez empresarios riojanos creen que «estamos entrando» en una nueva crisis

García-Calzada ha destacado que el primer trimestre del año, en comparación con el del 2018 (la entidad ha cambiado de metodología y las comparativas se hacen a partir de este momento interanuales no intertrimestrales) «ha sido bueno excepto para el turismo», el único que ha saldado los tres primeros meses del año en números rojos. No por el impacto que haya podido causar la Semana Santa, que este año ha caído en abril, si no por «tratarse del peor periodo del año para el sector y por la debilidad del consumo». Y es que, precisamente, la fragilidad de la demanda es el principal factor que limita la marcha de los negocios para todos los sectores de manera global, pero en especial, para el turístico.

La encuesta, a la que han respondido 310 empresarios, se ha interesado por conocer su opinión sobre la situación económica: el 85,2% considera que las debilidades de la economía española «no van camino de resolverse»; el 77,4% identifica «un menor dinamismo en consumo e inversión» y el 63,2% entienden que «estamos a las puertas o entrando ya en una nueva crisis». «Una desaceleración -ha apuntado el dirigente cameral- señalada por diversos organismo y analistas«.

Ante este panorama, el presidente de la Cámara de Comercio de La Rioja ha reclamado «políticas económicas que sirvan para generar empleo» y en cuya definición se tengan en cuenta la posición de los empresarios «dentro del marco del diálogo social». Que pasa por considerar «un error» las subidas de impuestos y del déficit público y la derogación de la reforma laboral «que permitió crear un número importante de puestos de trabajo», ha defendido García-Calzada. En este sentido, ha reclamado «seguridad jurídica», una armonización normativa en España y la reducción de las cotizaciones sociales, «donde se ha hecho todo lo contrario, ya que las cuotas, en el caso de los contratos de baja duración, »se han incrementado el 40%«.