«Es muy sacrificado trabajar por cuenta propia y ser empresario está denostado»

En este sentido, el Gobierno regional sí está dando ahora ayudas directas a los autónomos «pero son sólo un elemento de actuación», señala el presidente de la asociación sectorial en La Rioja. Estas aportaciones económicas –ahora de 2.100 euros para trabajadores de 30 a 59 años y antes se dieron de 2.700 euros para menores de 30 y mayores de 60 en un plan que un presupuesto global de 55 millones– «han de servir para regenerar el sector, para que el ecosistema emprendedor se adapte a los retos tecnológicos o para mejorar la productividad».

Entre los problemas que destaca Melchor aparecen la alta tasa de edad de los autónomos y la falta de relevo generacional, «que se unen a la crisis de precios –de materias primas, de energía...–, la falta de incentivo y las dificultades que nos encontramos para hacer de nuestro sector un ámbito atractivo para el emprendizaje».

El máximo responsable de ATA considera que en La Rioja «necesitamos ofrecer una estrategia personalizada para el ecosistema del trabajo autónomo, que es tan amplio como el número de actividades económicas que existen». Fernando Melchor propone para ello «poner en valor a los emprendedores, desarrollar estrategias de crecimiento –de negocios casi unipersonales a pymes– y fomentar la educación empresarial en los colegios e institutos».

Y no se olvida de una última reivindicación «urgente», en este caso a la Administración:«Necesitamos reducir las trabas administrativas». Es otro lastre en la actividad diaria del autónomo.