El riojano Celso Morga renuncia a su cargo como arzobispo de Mérida-Badajoz

El riojano Celso Morga Iruzubieta renunció a su cargo el pasado lunes como arzobispo de Mérida-Badajoz. El religioso, de 75 años y natural de Huércanos, tomó posesión de dicho cargo el 15 de noviembre de 2014 cuando sustituyó a Santiago García Aracil quien también había cumplido los mismos años que Morga, considerado el momento de jubilación para un arzobispo. De él dijo su predecesor que era «fundamentalmente buena persona y de gran sencillez, con un gran bagaje de experiencia pastoral acumulada en los veintisiete años de trabajo en el Vaticano» (Nuncio de Su Santidad) y «se trata de un sacerdote íntegro, muy bien preparado, no sólo por su formación personal sino, sobre todo, por una larga experiencia en la atención a los sacerdotes como colaborador que ha sido del Papa en la Ciudad Romana».

El riojano continuará al frente de la Archidiócesis hasta que el Papa acepte dicha renuncia y nombre un sustituto, según apunta el medio Vida Nueva Digital, que revela que en su carta de renuncia ha dado las gracias a Dios por «oficio episcopal que, por mandato de Su Santidad me fue conferido hace ya ocho años« y ha querido subrayar que «el pastoreo del Pueblo de Dios es un gozo que guardaré siempre en el corazón como un tesoro inestimable. Ahora sé que debo dar un paso atrás, y evitar la tentación de creerme imprescindible».

Morga nació el 28 de enero de 1948, siguió los estudios institucionales en el Seminario diocesano y fue ordenado presbítero el 24 de junio de 1972 por su diócesis de origen (Calahorra y Calzada-Logroño), publicaba Diario LA RIOJA en sus primeros días como arzobispo.

Entre 1974 y 1980 fue párroco de Anguiano, Viguera (España) y vicario judicial adjunto en la propia diócesis y en 1978 obtuvo el doctorado en Derecho Canónico en la Universidad de Navarra.

De 1980 a 1984 y a través de la Obra de Cooperación Sacerdotal Hispanoamericana llega a la archidiócesis de Córdoba (Argentina), donde desempeñó los cargos de vicario judicial adjunto, profesor de Derecho Canónico y confesor en el seminario archidiocesano.

Entre 1984 y 1987 fue párroco de la parroquia de San Miguel en la ciudad de Logroño (La Rioja). Posteriormente, y hasta el año 2000 desempeñó sus servicios como oficial en la Congregación para el Clero; de 2000 a 2009 como jefe de servicio y de 2009 a 2010 como subsecretario.

El 29 de diciembre de 2010 fue nombrado secretario de ese dicasterio de la curia romana y asignado a la sede titular de Alba Marittima como arzobispo. Su ordenación episcopal se produjo el 5 de febrero de 2011, precisó el Vaticano en una nota de prensa.

Morga Iruzubieta es autor de varios libros de espiritualidad y pastoral y ha publicado diversos artículos sobre la vida y ministerio sacerdotales en el diario oficial vaticano «L'Osservatore Romano».

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