La Rioja se sitúa a la cola del crecimiento turístico en España durante el verano

Pero este incremento en las ventas de las empresas turísticas y hoteleras –por el contexto inflacionista y la fortaleza de la demanda– no ha sido igual en todas las regiones. Y en esta comparativa La Rioja no sale bien parada, sino todo lo contrario. Es la segunda región con menor porcentaje de aumento en las cifras de negocio, un 10,7%, y sólo supera el dato de Murcia (2,3%). En cambio, la vecina comunidad del País Vasco fue el destino que más creció, un 27,4%, según los datos de la patronal Exceltur.

«Esto viene a confirmar nuestras sensaciones y nuestros números: el verano fue irregular. Junio y julio estuvieron flojos y aunque luego la situación repuntó en agosto y septiembre, la mejoría no fue completa», explica el presidente de la Asociación de Hoteles de La Rioja, Demetrio Domínguez, que considera que «aún nos queda mucho camino por recorrer. Es clave tener una estrategia turística y saber si queremos priorizar el número de visitantes o apostamos por calidad».

En este sentido, el responsable del colectivo que agrupa a las casas rurales, José Joaquín Sanz, también tiene claro que «el turismo en La Rioja tiene un potencial enorme pero hay que creer seriamente en nuestras posibilidades. Y es necesario también pasar de las palabras a los hechos cuando decimos que las administraciones públicas y la iniciativa privada han de ir de la mano».

El estudio de Exceltur también recoge las previsiones del sector para este último trimestre de 2023 y La Rioja, como muchos destinos turísticos de interior, adopta una posición de cautela y pronostica un crecimiento del 7,9%, siempre en función de la demanda del visitante nacional y de las escapadas de proximidad.