La Rioja, sin relevo suficiente para 50.456 'baby boomers' que empiezan ya a jubilarse

Este fenómeno de natalidad récord conocido como 'baby boom' se produjo entre 1958 y 1977, con más de 81.000 nacimientos en la comunidad (650.000 en España): hasta 1965, más de 4.000 al año, y a partir de ese ejercicio, por encima de los 3.800 hasta el final del período histórico. Cifras que prácticamente duplican el número de bebés que vienen al mundo en la actualidad (2.192 en 2021).

Los 'baby boomers' son hijos de una explosión demográfica que estalló tras la Segunda Guerra Mundial y que llegó a España con algo más de una década de retraso. Conforman la generación que pasó de la dictadura a la democracia, la que incorporó la mujer al mercado laboral, la que protagonizó la entrada del país en la Unión Europea, la que vivió el cambio de la peseta al euro y también la que se adaptó a la mudanza del mundo analógico al digital. También constituyen el cuerpo laboral con estudios más avanzados y carreras de cotización más largas que dan derecho a pensiones más altas que las de las generaciones que les precedieron.

Con todo, y al margen de la tensión presupuestaria que esta situación generará en las arcas de la Seguridad Social, para La Rioja genera un problema en el mercado de trabajo ante la falta de jóvenes que reemplacen en su totalidad estas retiradas laborales.

Según los últimos datos publicados, correspondientes al tercer trimestre de 2022, y siguiendo las cohortes de edad establecidas en su estudio por CaixaBank, uno de cada tres riojanos (32,5%) en edad de trabajar tiene entre 51 y 64 años (el bloque de los que empiezan a vislumbrar su jubilación). Son 50.456 personas en valores absolutos frente a las 35.552 (22,9%) menores de 31 (su colectivo de relevo). La serie de edades se completa con los 69.242 (44,6%) entre 31 y 50 años. En el caso de España, las ratios son del 31,1%, 24% y 45%, respectivamente.

Analizando por comunidades autónomas, la situación se presenta «más problemática», según los autores del informe, en las regiones del noroeste de España: Asturias (36,5%), Castilla y León (35,9%), Cantabria (34,1%) y País Vasco (33,9%) cuentan con los porcentajes más elevados de población potencialmente activa entre 51 y 64 años. En el otro lado de la balanza se sitúan Baleares (28,2%), Murcia (28,6%), Madrid (29,3%) y Cataluña (29,8%). Así, La Rioja ocuparía una posición intermedia en la tabla.

El estudio también permite comprobar cómo destaca en algunas regiones el diferencial entre personas de 16 a 30 años respecto a los 'baby boomers'. El dato es «especialmente llamativo», incide el documento, en Asturias, donde alcanza los 17,8 puntos porcentuales. En La Rioja son 9,5 puntos. El resto de comunidades con población potencialmente activa envejecida también presentan diferenciales elevados. Por el contrario, Murcia (2,3 puntos porcentuales), Baleares (3,7) y Cataluña (4,7) disfrutan de una situación más equilibrada.

Y este desajuste generacional no ofrece signos esperanzadores de corregirse a tenor de las proyecciones de población que realiza cada dos años el Instituto Nacional de Estadística. La última, publicada el pasado octubre, prevé que la población crezca en La Rioja el 7,3% en los próximos 14 años hasta alcanzar en ese plazo temporal los 338.800 residentes, tras sumar 22.904 habitantes hasta 2037. La tasa riojana se quedaría por debajo de la nacional, ya que el incremento pronosticado para España es del 8,9%.

Según estas previsiones, el saldo vegetativo (diferencia entre nacimientos y defunciones) no abandonará su resultado negativo en La Rioja y el 27,8% de la población total será mayor de 65 años frente al 21,75% de octubre de 2022.

A día de hoy, y por decimocuarto año consecutivo, la ratio de cotizantes por jubilado es inferior a dos. El último ejercicio con ese valor fue 2008 con 2,13 afiliados por pensionista.