La Rioja mantendrá abiertos «todos los centros de salud en verano» pese a la falta de médicos

El plan, que, según Ganuza, se ha elaborado conjugando las necesidades asistenciales y el derecho al descanso de los profesionales, se sostendrá con el mismo personal y los refuerzos habituales. Además, se ha solicitado a los médicos residentes de cuarto (MIR) que terminan su periodo de formación el próximo mes de septiembre que voluntariamente y siempre supervisados por algún adjunto hagan alguna guardia. La petición todavía no ha obtenido respuesta, aunque esperan contar «con esa baza a la hora de tener algún imprevisto, siempre que haya un adjunto y siempre voluntariamente», insiste.

Precisamente el tema de los MIR fue uno de los más polémicos en el encuentro con la ministra. Se da la circunstancia de que la pandemia de covid provocó que los residentes de 2020 empezaran algo más tarde de lo habitual a trabajar en la sanidad, y por tanto ahora, que están en el último año de residencia, terminarán también meses más tarde, en concreto en septiembre. Este retraso supondrá que las comunidades no puedan contratarlos como especialistas para suplir las vacaciones de los profesionales como acostumbraban.

En La Rioja tampoco variará la asistencia en los módulos de actividad extraordinaria por las tardes con profesionales mayores de 55 años exentos de guardias, todo voluntario, y donde hay más listas de espera.

Al margen de los planes puntuales, la gerente de Atención Primaria entiende que el Ministerio tiene que acometer un cambio estructural. «Hay que insistir, tiene que hacer algo, que tomen las medidas estructurales necesarias porque no es un problema de verano, va más allá del verano».

Respecto a las críticas de los sindicatos, que sostienen que la pelota no solo está en el tejado del Ministerio, sino también en el de la Comunidad que podría mejorar las condiciones de los facultativos para que no se vayan a otras comunidades, Ganuza entiende que el hecho de que se resuelva el verano sin cierres es suficiente respuesta. «Las condiciones son mejores que las de muchas de las comunidades que tenemos al lado. Tenemos flexibilización horaria, conciliación, manutención y coches eléctricos para los que se desplazan».