«Un abrazo lleno de fuerza para Ana»

Casi de forma simultánea, el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Estella decretaba el ingreso en prisión provisional y sin fianza para el agresor. En el auto, contra el que cabe recurso, la jueza le imputa delitos de asesinato en grado de tentativa, violencia doméstica y de género, lesiones y maltrato familiar.

A mediodía, y a pesar de la lluvia, los vecinos de Quel acudieron a la plaza de España donde el alcalde, Víctor Manuel Rada, leyó un manifiesto de «condena contra cualquier violencia contra la mujer, no admitiendo ningún tipo de justificación». Dijo estar todos reunidos «para hacer frente a esta lacra social», trasladó «la mayor fuerza posible para nuestra amiga Ana y todos sus familiares y amigos» y deseó su pronta recuperación.

Rada indicó que la mejor forma de combatir este problema social es la tolerancia cero. «Hoy debe ser un día de reflexión, de tomar más conciencia, de revisar en qué podemos mejorar, de dar visibilidad y no silenciar y hacer un llamamiento alto y claro para seguir trabajando para que nuestra sociedad sea más justa (...). Sin igualdad, no hay amor», terminó el alcalde. Después se guardaron cinco minutos de silencio.

Entre otras autoridades, estuvieron en Quel la presidenta de La Rioja, Concha Andreu; la consejera de Salud, Sara Alba; la delegada del Gobierno, María Marrodán; el senador Pedro Montalvo; los dirigentes populares José Ignacio Ceniceros, Alberto Bretón y Diego Bengoa; y las alcaldesas de Calahorra, Elisa Garrido, y Autol, Catalina Bastida, quien preside el consejo de salud de la zona de Calahorra.

En la tarde del viernes, varias enfermeras se despedían de su compañera deseándole una guardia tranquila en el centro de salud de Arnedo. Desde esa cercanía con quien es muy querida en Arnedo desde que hace 15 años formó parte del cuerpo de refuerzo en la residencia de mayores y ahora en las guardias del centro de salud, sus profesionales, arropados por decenas de vecinos, integrantes de la Corporación municipal y el presidente del Colegio de Enfermería de La Rioja, Pedro J. Vidal, se concentraron a mediodía de para transmitir a Ana «un abrazo enorme lleno de fuerza», «un mensaje de ánimo, apoyo, solidaridad y cariño para que se recupere lo más pronto posible» y para rechazar una violencia que es pura contradicción a la vocación de los sanitarios en la defensa y protección de la vida.

Sus compañeras destacan su carácter abierto y comprometido, la responsable de Enfermería del centro, Esther Llorente, llamó a todos a erradicar la lacra de la violencia de género.

Las concentraciones de protestas se han repetido en localidades como Nájera, Haro, Santo Domingo y Logroño.