La Renta de este año, 99 euros más cara por el impacto de la inflación

La explicación está en que el Ministerio de Hacienda, la autoridad sobre las comunidades de régimen común, no ha adaptado a la inflación las tarifas y el resto de elementos de la estructura del impuesto, como el pasado jueves solicitó el Consejo General de Economistas, lo que de facto se traduce en una subida silenciosa del impuesto que dejará en las arcas públicas unos ingresos extra de más de 4.000 millones de euros.

Solo los contribuyentes vascos y navarros se librarán de este impacto de la inflación en el IRPF, ya que las Haciendas Forales sí han adaptado sus tarifas tributarias para absorber el efecto del IPC sobre la factura fiscal de sus ciudadanos.

Los umbrales de renta dividen en tramos el impuesto y definen los tipos impositivos que se deben pagar, mayores cuanto más altas son las rentas. Así, una subida salarial puede hacer que los contribuyentes salten de tramo, aunque en realidad, esa mejora de sus ingresos no sea real porque la ganancia de poder adquisitivo se pierde con una inflación elevada. En el caso de La Rioja, el IPC creció el 7% el año pasado, lo que quintuplica la mejora retributiva reflejada en las nóminas (subida salarial media pactada del 1,47%). El 7% es el índice más alto de los últimos 20 años, toda la serie temporal que escruta el INE.

Además de los tipos impositivos, la inflación también penaliza otros elementos del IRPF como los mínimos exentos por circunstancias personales y familiares, y las deducciones.