Simulacro de operación antiyihadista en Logroño

El simulacro ha consistido en la detención de tres yihadistas con el apoyo logístico de drones, un helicóptero y equipos de rescate y altas capacidades de la Unidad de Acción Rural (UAR), que tiene su base en La Rioja.

El PETE, ubicado sobre una superficie superior a las 27 hectáreas, supone la homologación real con otras fuerzas policiales que ya disponen de instalaciones similares y será referente nacional e internacional en materia de intervención policial operativa y adiestramientos especiales, ha informado el coronel jefe de la UAR, José Antonio Iglesias.

El proyecto, que surgió en enero del 2005, incluye un campo de prácticas, que permite diferentes posibilidades de entrenamiento en áreas como tiro, conducción y urbana; y un centro de formación europeo que dinamice este polígono de entrenamiento.

El campo de prácticas consta de tres espacios para la realización de diferentes actividades de entrenamiento, una área de tiro, un área de conducción y un área urbana, consistente en una ciudad simulada para entrenamiento y prácticas, y cuya primera fase de la obra civil se ha inaugurado hoy.

Asociado a esta primera fase se encuentra el proyecto tecnológico, que está en su última fase de desarrollo, según Iglesias, quien ha recalcado que este complejo es «un proyecto vivo», cuyo gran reto es su gran inversión, superior a los 22 millones de euros para la totalidad de sus cuatro fases. Ello permitirá disponer de una infraestructura en la que realizar también ejercicios conjuntos de coordinación, investigación operativa, mando y control, tanto en el ámbito nacional como en el de las organizaciones europeas e internacionales de seguridad y defensa en las que la Guardia Civil participe.

Sobre el proyecto GARSI Sahel, su director, el general Francisco Espinosa, ha informado de que fue aprobado por la Unión Europea y liderado por la Guardia Civil y gestionado por la Fundación Internacional para Iberoamérica de Administración y Políticas Públicas (FIIAPP).

Está integrado por España, Francia, Italia y Portugal y permitirá garantizar la seguridad y estabilidad en los países del G-5 Sahel (Mauritania, Mali, Niger, Burkina Faso y Chad) y Senegal, la mejora de las capacidades operacionales, el refuerzo del control efectivo del territorio y extender la acción del Estado de Derecho al conjunto del Sahel, ha indicado. Ha señalado que, para ello, se están creando seis unidades similares a una Compañía GAR, dotándolas de formación, medios y competencia para ponerse operativamente en marcha.

Se pretende, así, mejorar la acción preventiva y reactiva de las fuerzas de seguridad nacionales del SAHEL mediante la creación de las condiciones para una mejor cooperación transfronteriza y una lucha «más eficaz» contra redes terroristas, crimen organizado y otras amenazas trasnacionales.