La solicitud e impulso de la denominación de origen Viñedos de Álava ha pasado factura interna a la Asociación de Bodegas de Rioja Alavesa (ABRA). Son varias las empresas de la comarca que decidieron darse de baja al considerar que no habían sido informadas, mientras ... que otras, en su día firmantes e incluso impulsoras, tampoco respaldaron la reactivación de la DOP 'Viñedos de Álava' que, en principio, había quedado paralizada. De hecho, en las últimas elecciones al Consejo Regulador, la agrupación de bodegas familiares alavesas acreditó la representación de 40 bodegas menos que en el 2017.
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En este sentido, tras la aprobación de los vinos de viñedo singular y de municipio por parte del Consejo Regulador de Rioja, ABRA accedió a dejar en suspenso la tramitación al considerar que se cumplían las exigencias de diferenciación de vinos para la zona de Rioja Alavesa. Sin embargo, en enero del año 2020 el Gobierno Vasco decidió reactivar la DOP propia, a petición de ABRA, lo que fue considerado por el Consejo Regulador una «traición» de la que, además, tuvo conocimiento por la prensa.
De nuevo, la iniciativa de ABRA provocó fuertes discusiones internas dentro de la asociación, mientras que a nivel político también paso factura al PNV, con una clara división entre la Diputación alavesa, partidaria de continuar trabajando en la diferenciación de zona dentro de Rioja, y el Gobierno Vasco proclive a ambas opciones, aunque en el caso de Viñedos de Álava de una forma más tibia.
La DO propia dentro de Rioja
De hecho, la política participa abiertamente en la comarca alavesa, con Bildu apoyando la nueva DOP y con el PNV sin estorbar la demanda de ABRA, pero impulsando otras alternativas.
Así, los nacionalistas vascos sorprendieron el pasado mes de noviembre al sacar adelante en la Mesa del Congreso un acuerdo para el debate en pleno de una proposición de ley para la reforma de la actual Ley de Denominaciones de Origen supra autonómicas (Rioja), que en la práctica pretendía crear un nuevo consejo regulador de zona, exclusivamente alavés, para la gestión íntegra y el control de la comarca, donde se tomarían, de forma independiente al resto de la DOC, las decisiones trascendentes. En definitiva, crear una denominación de origen propia para Rioja Alavesa, pero dentro de Rioja.
El asunto provocó no poco revuelo en la propia comarca, donde varias bodegas reprocharon al Ejecutivo vasco que actuase sin consultar previamente, y en el conjunto de Rioja. Finalmente, ante la presión social, el PNV retiró su propuesta para evitar la votación en el pleno, pero también advirtió de que había conseguido el compromiso del Ministerio de Agricultura para abrir un «diálogo sereno» sobre esta cuestión.
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