Juan Ramón Liébana |Secretario general de la patronal CPAR

«El problema es tal que ha llevado a la quiebra en un año a 32 constructoras riojanas»

Así se expresa el secretario general de esta asociación integrada en la FER, Juan Ramón Liébana, quien añade que la cascada de concursos públicos desiertos «es un problema que está desbordando a las Administraciones, que no saben cómo frenarlo».

Liébana recuerda que desde 1965 y hasta marzo de 2015, en el marco de «la primera ley moderna de contratos del sector público», estuvo vigente un mecanismo de revisión de precios que adecuaba los costes «de forma automática». «Y no sólo al alza –subraya–; también se aplicaba a la baja». Pero en abril del 2015 el sistema decayó y no fue hasta 2022 cuando, precipitado por la inflación, se aprobó un mecanismo excepcional de reequilibrio «a través de decreto Ley 3/2022». Ahora bien, este sistema tampoco ha protegido a las pymes riojanas, debido a que «las restricciones contenidas en esta norma han limitado de manera importante su aplicación», beneficiando de forma específica a los grandes operadores del sector.

Liébana reconoce que el Gobierno regional se adhirió al decreto, pero sus frutos son más bien escasos: el problema se ha ido «agravando» y la cifra de concursos de las Administraciones públicas a los que las empresas «ni han intentado concurrir» ha crecido de forma progresiva, ya que «saben que el desfase brutal entre los precios de licitación y los reales de ejecución no se va a corregir».

Por ello, la patronal riojana de la construcción insta a la Administración a «intentar articular mecanismos que permitan un reequilibrio efectivo de los contratos».