«Lo primero es la seguridad» de la N-232, insiste el delegado del Gobierno ante la petición de entrada de camiones

El grupo de trabajo, que integran responsables de las administraciones del Estado y de la Comunidad y que se reúne cada dos meses, ha estudiado a primera hora de hoy las circunstancias de los accidentes, tanto los del año pasado como los de este mes de enero y comenzó a analizar posibles actuaciones que reduzcan las consecuencias de los siniestros y que confluirán en una próxima comisión autonómica de seguridad vial que se celebrará en febrero.

El delegado ha destacado que todas las administraciones «estamos detrás de la principal vía que nos produce heridas y se está trabajando en que esa carretera, estando como está, sea lo más segura posible, aunque haya proyectos de convertirla, al menos en La Rioja Baja, en una vía de doble sentido. Mientras tanto tendremos que hacer un seguimiento para garantizar la mayor seguridad. Si vamos corrigiendo el estado de las carreteras y las circunstancias en las que cualquiera que coja el coche se sienta más seguro, estamos garantizando vidas y también que otros accidente no lleven necesariamente a la muerte«.

Del trazado de Calahorra a Alfaro, ha adelantado que, con el Gobierno de Navarra «ya se han incorporado unos kilometros en el tramo del limite con Navarra porque hay una parte de unión con la A15, y esa coordinación ya existe. Dentro de pocos meses, mejor dos que tres, igual anunciamos ya el estudio informativo de ese tramo». «La apuesta es la autovía, los últimos accidentes que ha habido en la 232, si hubiera sido en autovía, no habría sido tal tragedia», ha argumentado también.

La responsable de Tráfico en La Rioja, Beatriz Zúñiga, se ha fijado en que, en este tipo de encuentros se estudian los accidentes y sus circunstancias y ha tenido en cuenta que en los últimos, en alrededor del 90 por ciento de los casos, han tenido un factor humano. Así, la intención es poner en práctica medidas -que si de vigilancia, de mejoras de la infraestructura...- que puedan paliar en lo posible las consecuencias de ese factor humano, de manera que las consecuencias no sean tan graves.