El presunto transportista de drogas para el líder de la red en La Rioja declara que solo consumía

En concreto, J.A.H.S.R., a quien la investigación le atribuye el rol de transportista de drogas para el líder de la red en La Rioja, negó su participación en la supuesta organización criminal y aseguró al tribunal que lo juzga que no ha distribuido drogas «ni sé nada de nada». Se reconoció consumidor de diversas sustancias desde los 13 años. «Al principio consumía los fines de semana y ahora un gramo al día», señaló.

El procesado A.G.V., quien supuestamente suministraba los productos necesarios para la fabricación de drogas en un laboratorio acondicionado en una vivienda en Labraza (Álava) adscrita a D.S.F., no negó conocer a este procesado, pero sí las labores que le atribuye la Fiscalía. «No pertenecía a ninguna organización que fabricara drogas y D.S.F. ni de coña tenía conocimientos para fabricarlas», precisó.

En la misma vista declaró M.T.N, que se enfrenta a 6 años de cárcel por supuestamente cooperar en la entrega de sustancias a compradores. Ante el tribunal explicó que mantuvo una relación con J.J.P. pero nunca le vio vender. Preguntada sobre una de las conversaciones telefónicas con su entonces pareja intervenida por la policía, explicó que cuando él le pidió que bajase donde los contenedores a darle «el par ese que te he dicho» al comprador «pistón» se refería a que «les hiciera un par de bocadillos» porque se les había hecho tarde.

En la misma línea declararon el resto de acusados. Todos ellos admitieron elevados consumos de droga, pero ninguno que vendiera, distribuyera o suministrara nada relacionado con sustancias estupefacientes.

Tras los acusados, arrancó el turno de varios de los policías nacionales que participaron en las vigilancias de los acusados que concluyeron con la detención de los veinte acusados. El juicio, que previsiblemente concluirá el próximo día 22, continuará este viernes con la intervención como testigos de más agentes.

Según el escrito de acusación, las pesquisas comenzaron después de que el Grupo UDYCO de la Brigada Provincial de Policía Judicial de la Jefatura Superior de Policía de La Rioja recibiera informaciones sobre la posible existencia de un punto de elaboración, venta y distribución de sustancias estupefacientes sintéticas, principalmente sulfato de anfetamina (speed) y metanfetamina, en un inmueble de Lardero.

Fruto de la investigación y de las intervenciones, se destapó todo un entramado de venta de drogas que extendía sus tentáculos por varios municipios de La Rioja, Navarra y Álava y que contaba con un laboratorio de drogas sintéticas en la localidad alavesa de Labraza.