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Los tractores vuelven a provocar series retenciones en Recajo durante la jornada de protestas que están llevando a cabo los agricultores en La Rioja, en la entrada y salida de la LO-20 y la AP-68, mientras que un pequeño grupo de jóvenes ... agricultores se concentró en el interior del polígono industrial dando vueltas a la avenida de Ebro
Los agricultores han regresado este miércoles al polígono industrial El Sequero de Agoncillo y Arrúbal, si bien la concentración de tractores en la zona empresarial ha sido de alguna manera simbólica, centrándose la protesta en Recajo, a la entrada y salida de la AP-68 y la LO-20. La N-232 entre Agoncillo y Arrúbal ha estado bastante despejada durante buena parte de la mañana, no así el tramo entre Recajo y Agoncillo, donde se ha concentrado el tráfico lento y denso. En cambio, en el interior de la zona empresarial circulaban media docena de tractores por la avenida del Ebro de forma muy vistosa pero poco molesta, puesto que los coches con los que se topaban rápidamente lograban una escapatoria por las calles perpendiculares adyacentes, de manera que los atascos duraban poco tiempo.
Rubén, joven agricultor de Ausejo, conducía su voluminoso tractor y se quejaba de los precios y las importaciones sin trazabilidad, cuando aquí se la exigen. «Me parece muy bien que haya trazabilidad, pero en todos los países, no solo en España, que se regule todo», declaraba Rubén. En cuanto a la segunda jornada de protesta y el cambio en el proceder de la zona de Agoncillo, Rubén reconoció que se habían dividido, para dejarse ver más. «Estamos dolidos y queremos que la gente vea que ya no aguantamos», advirtió Rubén.
Ricardo Ruiz, joven agricultor de Murillo de Río Leza, montaba en un tractos con un buzo a modo de labrador hastiado y con un letrero en el que se leía «Nos matan». «Estamos abandonados. Se ríen de nosotros con los precios del gasoil, cualquier chorrada está por las nubes y no se nos valora, cuando es un trabajo fundamental el que hacemos», explicaba Ricardo. Y en cuanto a la protesta, reconoció que su deseo es que «la gente se dé un poco de cuenta, hay mucha gente que nos apoya y creo que es necesario hacer esta protesta, en la carretera muchos coches y camiones nos grita en señal de que están con nosotros, aunque siempre hay alguien que pone mala cara».
Así, después de horas de ejercer presión en el tráfico en la zona de Recajo, en la que la Guardia Civil poco ha podido hacer, salvo evitar accidentes e incidentes, todos los tractores de la zona se han dirigido sobre las 10.00 horas a Logroño, con la intención de invadir la circunvalación de la capital riojana, como así ha sido, pero también provocando una retención mayor en la N-232, desde Agoncillo hasta prácticamente la ciudad. La jornada para los agicultores ha comenzado por segundo día consecutivo a las 5.30 horas y, tras una parada para desayuna sobre las 9.30 horas, han continuado su protesta pacífica en la zona de Agoncillo.
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