«Estamos preparados para abrir lo más rápido posible en cuanto nos lo permitan»

Desde la estación de esquí de Valdezcaray confiesan que todavía no pueden abrir, porque no hay nieve suficiente. La lluvia de esta noche se ha llevado los cinco centímetros que quedaban. No saben cuándo les será posible volver a la actividad pero, aún así, reconocen que esperan el momento con muchas ganas.

«La incertidumbre es muy grande. Pero tenemos todo preparado para abrir lo más rápido posible en cuanto nos lo permitan», desvela Jorge Lladó, gerente de la estación de esquí de Valdezcaray. Reconoce que lo único que pueden hacer es «prepararse cada día mejor». ¿Cómo? Con un buen protocolo COVID con mascarilla obligatoria, filas únicas, distancia o desinfección de los propios materiales, entre otras cosas. «Llevaremos a cabo todas las medidas que están funcionando en otras estaciones».

Para conseguirlo, han habilitado como principal novedad para esta temporada, un nuevo telesilla que desdoblará el centro neurálgico de la estación. «Subirá de 1.600 a 1.800 y será capaz de llevar a 1.540 visitantes por hora. Evitará las filas y reducirá los tiempos de espera», explica el gerente.

Pero, a pesar de este año tan atípico, también incorporarán otras novedades. «Llevamos todo el 2020 trabajando en cómo desestacionalizar Valdezcaray porque, cada vez, las temperaturas son más bajas». Es por ello que, en cuanto abran, los usuarios apasionados del ciclismo podrán colgar su propia bicicleta en el telesilla para subir hasta arriba y, de manera posterior, descender por los senderos habilitados. «No se trata de bajar a toda prisa, sino de hacer ochos, bumpers o saltos, entre otras cosas». Una nueva actividad que estará disponible para todos los públicos y niveles.

Pero también probarán la viabilidad de poder esquiar en la zona sur de la estación. «Intentaremos transportar a los esquiadores que bajen de la zona sur hasta la cara norte de nuestras pistas. Un servicio que funciona muy bien en Formigal y que, por eso, queremos probar a ver qué tal», añade Lladó.

En definitiva, protocolos anti COVID y numerosas novedades para satisfacer los gustos y demandas de los futuros visitantes. «Esperaremos a la próxima borrasca y a que se equivoquen las predicciones, pero para bien, para que nos caiga mucha nieve». Sobre todo, porque, hasta entonces, no podrán proceder a su reapertura.

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