El precio del coche de segunda mano se dispara un 14,7% en La Rioja y en España sube el 1,5%

Tanto desde Ancove como desde la Asociación Riojana de Automoción (Ariauto), integrada en la patronal FER, apuntan que el hecho de tener un «volumen de ventas de coches de segunda mano menor que en otros territorios, por el tamaño de nuestra comunidad, cualquier dato puede distorsionar en cierta manera la realidad». Y esos factores, concreta el presidente del colectivo de concesionarios que forma parte de la Federación de Empresas de La Rioja, Eduardo de Luis, pueden obedecer a las «exportaciones» de vehículos de algunas marcas porque se matriculan aquí pero se venden fuera a un precio muy parecido al de un coche nuevo.

Asimismo, «estamos en un sector donde desde cualquier parte de España se puede ver la evolución casi en tiempo real de nuestro negocio. Y si hay que llegar a unos objetivos para salir bien en esas estadísticas, el concesionario matricula los coches que necesita, con el consiguiente coste financiero por su parte», añade el portavoz empresarial, pero luego esos automóviles se venden como de 'kilómetro cero' y sin una gran rebaja en el precio.

En los vehículos de ocasión de más de ocho años, ese incremento interanual en La Rioja todavía es mayor, de un 17,4% –hasta los 10.407 euros–, y también muy por encima de la subida media en el conjunto de España, cifrada en un 4,3%. Este mercado de los coches usados sigue teniendo un peso relevante para los vendedores de coches en la región y tres de cada cuatro operaciones de compra registradas en la región el pasado 2023 fueron de estos vehículos; en concreto, 11.742 –se incluyen turismos y todoterrenos y quedan al margen furgonetas– de un total de 15.107.

El elevado precio de los coches nuevos frena a los clientes «y mucha gente prefiere comprar uno de segunda mano y tenerlo durante unos años porque así se ahorra dinero», asegura Eric Iglesias, presidente de Ancove. Aunque en La Rioja el precio medio al cierre del pasado año creció muy por encima de todas las comunidades –sólo bajó, en comparación con 2022, en Extremadura, Cataluña y Aragón– y superaba en 2.000 euros al de Navarra, por ejemplo. En cambio, la tendencia nacional ha sido de moderación porque «la normalización de los stocks» ha hecho aumentar la venta de unidades nuevas «que han contenido los precios tras las fuertes subidas de años anteriore», concluyen desde Ancove.