Policías y guardias civiles creen que la reforma en la Ley de Seguridad les dejará «vendidos»

La reforma pergeñada por PSOE y Unidas Podemos de la Ley de Seguridad Ciudadana -'Ley Mordaza', según sus detractores- sigue generando una oleada de protestas entre los trabajadores de las Fuerzas de Seguridad en todos el país. La Rioja tampoco es ajena a ese malestar, que este jueves se visibilizó en una concentración en El Espolón ante la sede de la Delegación del Gobierno. En torno a la plataforma bautizada 'No a la España Insegura', cerca de un centenar de profesionales junto a representantes sindicales y de partidos como PP y Cs censuraron las modificaciones que a juicio de los implicados les dejarán «vendidos» en su quehacer diario.

El subinspector del Cuerpo Nacional de Policía y vicepresidente regional del SPP, José Carlos Rico, ejerció como portavoz advirtiendo de que los cambios anunciados «van contra la lógica y el trabajo policial», de manera que «el ciudadano será el realmente perjudicado». Uno de los puntos más controvertidos es la eliminación de la presunción de veracidad en las actas policiales. «Nos deja prácticamente a los pies de los caballos», avisó Rico al tiempo que cuestionó que se pueda posibilitar la celebración de manifestaciones espontáneas, dado que «así el dispositivo que pueda preverse es nulo ante posibles incidentes». La plataforma se opone asimismo a otros aspectos en relación, por ejemplo, al material utilizado para el mantenimiento de la seguridad ciudadana, las identificaciones de indocumentados que no podrán durar más de dos horas o la posibilidad de que los agentes sean grabados «poniendo en riesgo no solo nuestra integridad, sino la de nuestros familiares y nuestro entorno».

A través de un manifiesto y como preámbulo a la movilización nacional proyectada para el sábado, los congregados instaron al Gobierno de colación a «no vender la seguridad de la ciudadanía por intereses partidistas».

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