La Rioja, cada vez más lejos de las regiones más ricas de Europa

Eurostat publica los datos de PIB por habitante de las regiones en términos de Estándar de Poder Adquisitivo (EPA). Inicialmente el PIB se calcula en moneda nacional y luego se convierte a paridad de poder adquisitivo –PPS en sus siglas en inglés– sobre 100 como promedio de la UE.

Durante 2021, y como se puede comprobar en la infografía que ilustra esta información, el ranking de PIB per cápita regional expresado en términos de PPS nacional estuvo liderado por Luxemburgo (268). A continuación le siguieron Irlanda del Sur (261), Irlanda del Este y del Centro (ambas con 239) y Bruselas (204). Según Eurostat, el alto PIB per cápita de Luxemburgo y Bruselas «puede explicarse en parte por una gran afluencia de trabajadores que viajan diariamente» y en el de las tres regiones irlandesas en el hecho de que «algunas de las principales empresas multinacionales están domiciliadas» en ellas.

La potencia que muestran estas regiones evidencia aun más los datos moderados que arroja La Rioja, a la que la estadística comunitaria asigna un PIB per cápita de 89, esto es, once puntos por debajo de la media de la Unión. De hecho, solo tres comunidades españolas superaron en 2021 el promedio de la UE: Madrid (114), País Vasco (108) y Navarra (101). El resto, incluida La Rioja, se quedaron por debajo, de forma especial Andalucía, Canarias y Extremadura (las tres con una ratio de 62) y Castilla-La Mancha (67). En el conjunto del escalafón autonómico, La Rioja cerró 2021 en sexta posición, solo por detrás de Madrid, País Vasco, Navarra, Cataluña y Aragón.

Afinando más el análisis sobre la comunidad, los datos de Eurostat constatan que el PIB por habitante riojano ha retrocedido por segundo año consecutivo, aunque en la serie histórica nunca había bajado de los 90 puntos y el dato de 2021 marca el mínimo. Lo que contrasta con las décadas de 2000 a 2010, cuando prácticamente se mantuvo por encima de cien, haciendo techo en 2008 con 114. Además, en el ciclo que abarca de 2007 a 2010, la autonomía siempre figuró entre las cien primeras regiones de Europa.

Sin embargo, a partir de 2015 (un año después de haber salido técnicamente de la recesión provocada por el estallido de la burbuja inmobiliaria y la crisis financiera) el indicador bajó progresivamente de cien hasta quedarse en el suelo de 2021.

Comparado con 2019, último año de normalidad antes de la catástrofe económica y social del covid, el índice riojano perdió ocho puntos, ya que en 2019 se había quedado establecido en 97 sobre 100. Es decir, aunque la economía regional empezó en 2021 a recuperarse del shock provocado por la pandemia del coronavirus, el ritmo de avance (4,5%) fue insuficiente y no se pudo retomar el PIB per cápita por habitante de 2019.

Ahora bien, esta evolución no es exclusiva de La Rioja: todas las autonomías españolas han perdido peso en el conjunto de la Unión y han sido incapaces de recuperar los niveles previos a la pandemia. En especial las turísticas (Baleares, Comunidad Valenciana y Canarias), que han perdido más de once puntos en sus indicadores.