Dos mil pensionistas riojanos cobrarán entre 61 y 69 euros más al mes hasta final de año

Por Ley, todos los ciudadanos tienen derecho a pensiones de jubilación e invalidez, aun cuando no hayan cotizado nunca o lo hayan hecho, pero no por el tiempo suficiente, para alcanzar prestaciones de nivel contributivo. Los Presupuestos Generales del Estado de cada ejercicio establecen las revalorizaciones anuales de los importes, que para este año fue del 3% hasta quedar fijado en términos absolutos en 5.899,60 euros anuales, que se abonan en doce mensualidades más dos pagas extraordinarias (junio y noviembre). A partir de este importe, la cuantía individual actualizada para cada pensionista se establece en función del número de beneficiarios que vivan en el mismo domicilio, de sus rentas personales y/o de las de su unidad económica de convivencia, no pudiendo ser inferior este año a 1.474,90 euros anuales (105,35 euros mensuales en catorce pagas), que se corresponde con el 25% del importe íntegro para 2022. El Instituto de Mayores y Servicios Sociales (Imserso) se encarga de su gestión, mientras la competencia de las pensiones contributivas recae en el Ministerio de Empleo y Seguridad Social.

En La Rioja (con datos al cierre del mes de mayo), 1.994 personas perciben una prestación de estas características: 1.255 tienen reconocida la no contributiva de jubilación y el resto, 739, la de incapacidad permanente. Con la nueva medida anunciada el sábado por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, estos pensionistas verán mejoradas sus rentas el 15% entre julio y diciembre. El objetivo de este aumento retributivo es protegerles de la pérdida de poder adquisitivo derivada de la escalada de la inflación, que en mayo alcanzó el 8,7% (9,2% en La Rioja).

Según los datos del Imserso, la nómina media mensual hasta este mes de junio de las pensiones no contributivas de jubilación asciende en la región a 411,65 euros, tres veces menos que la cuantía de las contributivas (1.202,18 euros), mientras que las de invalidez superan por poco los 463 euros, dos veces inferiores a las contributivas (1.062, 52 euros).

La estadística arranca en 2015. En estos siete años, los importes promedios que se abonan en La Rioja han subido el 15,6% en el caso de las prestaciones de incapacidad permanente y el 14,8% en el de las de jubilación. También el número de perceptores ha aumentado desde 2015, aunque solo en el caso de las pensiones de jubilación, que lo ha hecho el 14,8%, ya que la cifra de beneficiarios de la prestación no contributiva de invalidez ha bajado durante ese periodo el 6,7%.

Además de estos perceptores de pensiones no contributivas, el plan nacional anticrisis prorroga el aumento del 15% del Ingreso Mínimo Vital (IMV) que se aplica desde abril. Se trata de una ayuda que cobran 7.578 riojanos. Otra medida presentada por el Gobierno es el abono de un cheque de 200 euros (en un pago único) a los hogares más vulnerables, esto es, con ingresos por debajo de los 14.000 euros (el Salario Mínimo Interprofesional): en La Rioja, uno de cada cinco asalariados, según la Encuesta Anual de Estructura Salarial del INE.