La Rioja pierde 700 empleos de enero a marzo, la mayoría de mujeres empleadas en el sector público

A priori, estos datos confirmarían una ligera desaceleración del mercado de trabajo riojano, con especial afección sobre el colectivo femenino, como consecuencia de la coyuntura crítica que caracterizó el primer trimestre, marcado por la escalada inflacionista de los precios, especialmente los de la energía. Sin embargo, el análisis del último año sí arroja indicadores claramente positivos para la comunidad, pues la EPA confirma 700 parados menos que en el primer trimestre de 2021 y 3.600 ocupados más.

Por sexos, el empleo damnificado durante los tres primeros meses del año en La Rioja fue el femenino: marzo cerró con 2.100 ocupadas menos que en el trimestre inmediatamente anterior, lo que contrasta con el aumento de 1.400 nuevos empleos masculinos. En tasa interanual, sin embargo, hay 4.200 ocupadas más que hace un año y 600 ocupados menos.

Del total de 140.400 ocupados, 75.600 son hombres y 64.800 son mujeres, lo que representa unas tasas de actividad del 65% y del 55,3%, respectivamente. En el caso de los 17.700 desempleados, 8.000 son hombres y 9.800 son mujeres, lo que deja la tasas de paro masculina en el 9,5% y la femenina en el 13,1%.

Por tipos de empleo, esto es, diferenciando entre quienes trabajan en el sector público (20.100) y los que lo hacen en empresas privadas (120.300), la EPA constata que el sector público (alcanzó su pico de ocupación en el segundo trimestre de 2021, con 24.600 personas) ha perdido empleo por tercer trimestre consecutivo. En concreto, 1.700 ocupados menos en las administraciones públicas respecto al cierre de 2021 y 2.300 por debajo de los que había hace un año. Por el contrario, la ocupación en el sector privado ha recuperado los niveles prepandemia (está en valores similares al segundo trimestre de 2019), tras crecer trimestralmente en 1.000 personas en La Rioja y en 5.900 si se coteja con la de hace doce meses.

Por sectores, la pérdida de empuje se ha dejado sentir en servicios (83.200 ocupados tras restar 2.400) y agricultura (8.100 después de perder 200), mientras la ocupación creció en 1.900 personas en la construcción (9.300) y en la industria (39.900) se mantuvo estable.

En cuanto a los efectos de la reforma laboral sobre la contratación indefinida, de la EPA se desprende que la legislación ha favorecido en exclusiva a las mujeres: hay 200 asalariadas fijas más que en el cuarto trimestre de 2021, hasta totalizar 44.700 mujeres. Por su parte, 48.400 hombres tenían un contrato indefinido al cierre de marzo, cien menos que al 31 de diciembre pasado.

En La Rioja, según la EPA, hay 158.100 activos, lo que supone un aumento de 500, el 0,3% más respecto al trimestre anterior; así como de 700 en relación al primer trimestre de 2021 (0,5% de subida).

La comunidad riojana registraba 263.600 personas mayores de 16 años (en edad de trabajar) entre enero y marzo pasados, 200 menos que el cuatro trimestre de 2021 y 1.300 por debajo de las de hace doce meses.

El Gobierno regional, a través de una nota de prensa, ha destacado la buena evolución interanual de los indicadores de la EPA, precisando que los datos del primer trimestre «no muestran la tendencia registrada por los datos oficiales facilitados cada mes por el Ministerio de Trabajo y Economía Social del Gobierno de España, que en el mes de marzo situaba la tasa de paro en un 9,9% en La Rioja, entre las menores del país, y con los mejores datos en la serie histórica de dicho mes desde el año 2008».

Para la FER, los resultados de la EPA revelan «la enorme dificultad por la que están atravesando las empresas y los autónomos en estos primeros tres meses debido a los desbocados precios de la energía y de los carburantes, la carestía de materiales, suministros y materias primas, una inflación disparada, que se ha situado hoy en el 8,4% y un conflicto bélico y económico en Europa por la invasión Rusia en Ucrania que está desestabilizando el comercio internacional». «Todo ello -añaden-, está desembocando también en un freno al consumo de las empresas y de los ciudadanos en general«. Así las cosas, »las empresas y los autónomos, que son los generadores de empleo, viven una situación de incertidumbre y de inseguridad que no tiene visos de recuperarse en el corto plazo y que todavía arrastra los dos años de crisis sanitaria de la que nos estábamos recuperando muy lentamente«.

UGT-Rioja considera que «el descenso del empleo es un fenómeno habitual en los primeros trimestres del año, puesto que vienen precedidos de la etapa navideña, donde la actividad económica es mayor y, por tanto, aumenta la contratación. No obstante, ya se pueden apreciar mejoras en cuanto a la calidad del empleo, fruto de los cambios introducidos por la nueva reforma laboral».

Por último, el PP de La Rioja ha denunciado que, «frente a la autocomplacencia de Andreu y su falta de autocrítica, la realidad es que seis comunidades tienen menos tasa de desempleo que La Rioja» y el paro «aumentó en La Rioja un 7,5% en el primer trimestre, 5 puntos más que en el conjunto del país».